Así lo recoge la Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación de la demarcación hidrográfica de Melilla, que también ve peligro en el desbordamiento del Río de Oro.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha abierto el plazo de exposición pública, durante tres meses, de la Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación de las demarcaciones hidrográficas de Melilla y Ceuta.
Según esta documentación y en la línea de lo que ya avanzó El Faro, la CHG ha detectado tres áreas con riesgo potencial de inundación en la ciudad: El Paseo Marítimo, el Melilla Puerto y la depuradora.
Además se incluyen otras dos áreas de “riesgo potencial significativo”: El Río de Oro y el Río Igsar Armanien.
La Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundaciones otorga a las zonas de Melilla Puerto, el Paseo Marítima y la depuradora una “vulnerabilidad alta por contener edificaciones u otras infraestructuras de alto valor”.
De hecho el Estudio General de la Demarcación de Melilla, que servirá para elaborar el Plan Hidrológico local, recoge que el principal problema de inundaciones por cauces pluviales lo genera en la ciudad el Río de Oro y en la línea de costa advierte de “temporales de Levante especialmente destructivos”.
La cuenca del Río de Oro, de 88 kilómetros cuadrados, explica el documento de la CHG, expuesto al público hasta abril próximo, carece de regulación y tiene dificultades de evacuación en su último tramo lo que “puede generar situaciones de carácter grave en la zona urbana de Melilla”.
Ese informe señalaba además que el Río del Oro “inunda fácilmente el badén de la frontera, interrumpe el paso en Pista de Carros, provoca la acumulación de agua en una zona de la frontera sin encauzar y su caudal podría desbordarse en caso de que se registren precipitaciones de más de 100 milímetros.
Adaptado a la Unión Europea
La exposición pública de la Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundaciones es el primer paso dentro del proceso de implantación de una normativa europea (2007/60/CE), relativa a la evaluación y gestión de los riesgos de inundación y del Real Decreto 903/2010, que la adapta al ordenamiento español.
La aplicación de esta directiva “tiene como principal objetivo reducir las consecuencias de las avenidas sobre la salud humana, el medio ambiente, el patrimonio cultural y la actividad económica”, explica la CHG.
La Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación selecciona las zonas con mayor riesgo de inundación, que son conocidas como Áreas de Riesgo Potencial Significativo de Inundación.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir abre el periodo de información pública, que se extenderá durante los próximos tres meses, con el objetivo de que en diciembre se encuentre ya elaborado el Mapa de Peligrosidad y Riesgo y antes del 2016 esté concluido el Plan de Gestión de Riesgo, tal y como establece la directiva europea.
Además, la CHG ha informado ya a las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno de Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha, Murcia , Melilla y Ceuta de la apertura de este proceso de información pública.
Las peores inundaciones datan del tercer trimestre del año 2008
Los peores episodios de inundaciones que ha vivido Melilla se dieron entre septiembre y diciembre de 2008, según la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
La primera de estas tragedias ocurrió el 27 de septiembre de ese año cuando una tromba de agua provocó inundaciones en calles, viviendas de planta baja y locales comerciales de la ciudad.
El segundo tuvo lugar el 26 de octubre de 2008 cuando el Río de Oro se desbordó y un mes después, el 27 de noviembre, fuertes precipitaciones inundaron zonas céntricas, patios y cubiertas de la ciudad.
La última de las inundaciones reseñables data del 1 de diciembre de ese mismo año cuando una lluvia torrencial causó problemas de desagües en zonas céntricas y barrios periféricos de Melilla.
Con estos datos en la mano, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha elaborado la Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación en la demarcación de Melilla, que permanecerá en exposición pública en los próximos tres meses.