Guerra: “Los partidos no estarán, como hasta ahora, exentos de responsabilidad penal”. El coordinador de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) en Melilla, Emilio Guerra, consideró ayer la reforma del Código Penal en materia de fraude fiscal y a la Seguridad Social, que entra en vigor el día 17 de enero, como “un paso en la lucha contra la corrupción”. La iniciativa de la formación upedista, aceptada por el Partido Popular en el Congreso, abre la posibilidad de perseguir penalmente a los partidos políticos como personas jurídicas, y por tanto, “se acabaron los privilegios en ese sentido. Los partidos políticos deberán vigilar mucho más lo que hacen sus cargos públicos y orgánicos”, apostilló Guerra.
El líder upedista melillense sostuvo que los delitos relacionados con partidos y sindicatos no son “menos graves que los cometidos por empresas o fundaciones, sino peor. No se hace ningún favor a la democracia manteniéndolos, como hasta ahora, al margen del Código Penal otorgándoles semejante impunidad”, dijo Guerra y añadió que los partidos que se han opuesto a esta modificación, en concreto, PSOE y los grupos nacionalistas, “tienen muy difícil explicarlo a sus votantes”. La corrupción, dijo, “es una amenaza para la democracia, socava la confianza de los ciudadanos en las instituciones y da el ejemplo contrario al que deben dar los cargos públicos”.