Los habitáculos estaban construidos en el salpicadero y en el maletero. El conductor del coche intentó huir, pero fue interceptado. La Guardia Civil localizado y rescató a dos inmigrantes que trataban de acceder a Melilla ocultos en sendos dobles fondos habilitados en el salpicadero y el maletero de un vehículo que procedía de Marruecos.
Según informó ayer el instituto armado en un comunicado de prensa, los dos inmigrantes, de 18 y 20 años y que dicen proceder de Guinea, fueron hallados el pasado martes, en el control de acceso de vehículos del puesto fronterizo de Beni Enzar.
El conductor del turismo, un marroquí de 26 años, se dio a la fuga en cuanto se inició el reconocimiento del vehículo, un turismo de la marca Volkswagen, modelo Vento, aunque fue detenido en las inmediaciones y ya ha ingresado en prisión.
La localización de los dos inmigrantes ocultos ha sido posible gracias a la utilización de una máquina que detecta los latidos del corazón y a la ayuda de un perro especializado en la búsqueda de personas, dos de los elementos con los que cuenta la Guardia Civil en su lucha contra el tráfico de seres humanos en los pasos fronterizos.
En el maletero del turismo se halló una plancha metálica con moqueta, que ocultaba un doble fondo en el que se hallaba una persona que fue auxiliada para salir, ya que presentaba síntomas de mareo, entumecimiento y respiración agitada, dado lo reducido de su espacio y el poco aire del que disponía para respirar.
En la zona del salpicadero, los guardias civiles localizaron a otra persona en su interior con los mismos síntomas de agotamiento, que también necesitó asistencia.
La reciente incorporación de perros detectores de personas al Servicio Cinológico de Melilla ha comenzado a dar sus frutos en la lucha contra las mafias que trafican con seres humanos, y se han convertido en un elemento “de vital importancia” para localizar a personas ocultas en dobles fondos y poder ser rescatadas en el menor tiempo posible.
Las dos personas localizadas y rescatadas se encontraban indocumentadas y aseguraron proceder de la República de Guinea. Atienden a las iniciales T.B. y O.D de 20 y 18 años de edad, respectivamente, y fueron puestos a disposición judicial en calidad de testigos y posteriormente entregados al Cuerpo Nacional de Policía a efectos de la aplicación de la vigente Ley de Extranjería.
Por su parte, el conductor del turismo que resultó detenido, responde a las iniciales A.B. y es un ciudadano marroquí de 26 años de edad. Fue puesto igualmente a disposición judicial como supuesto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, conocido en el ámbito coloquial como ‘tráfico de inmigrantes o de personas’, decretando su titular su ingreso en prisión.