De los más de 5.260 borregos que entraron en Melilla para la fiesta del Aid El Kebir, sólo cerca de setenta pasaron por el matadero municipal, pese a que es gratis y ayer abrió de 7:00 a 14:00 horas. Sólo una minoría de musulmanes melillenses aprovecha el matadero municipal para sacrificar el borrego de la Pascua Grande, pese a que casi todo son ventajas.
Los servicios del matadero municipal son gratuitos, las instalaciones abren a las siete de la mañana, cierran a las 14:00 horas y la plantilla garantiza a los musulmanes que el borrego será sacrificado como exige la religión islámica.
Los melillenses que ya lo han usado, repiten. “Te ahorras tener que limpiar la casa. Yo traje el mío a las siete de la mañana, me dieron el número 36 y he venido a recogerlo ahora. Llevo tres años haciéndolo aquí”, explica un vecino que pasó a recoger el borrego con sus hijos.
Otro musulmán que llevó ayer el borrego al matadero municipal explicó a El Faro que él vive en un piso y no tiene sitio para matar el animal. “Antes lo hacía en la casa de mi madre, pero ahora prefiero traerlo al matadero antes que sacrificarlo en la calle”.
Los que optan por seguir la tradición y matar el borrego en casa siguen siendo mayoría en Melilla. De los más de 5.260 animales que han entrado en la ciudad para esta fiesta del Aid El Kebir, sólo setenta pasaron por el matadero. La cifra es muy similar a la del año pasado, pero es superior a la de los inicios.
Así lo explicó ayer la consejera de Sanidad y Bienestar Social, María Antonia Garbín. “En los primeros años sólo pasaban por el matadero municipal unos 54 borregos. Hoy tenemos trabajando la plantilla del matadero al completo y lo seguiremos haciendo”.
Dentro de sus instalaciones, ayer por la mañana no pararon. Los matarifes por un lado y los desolladores por otro iban sacando poco a poco los borregos a la hora exacta en la que se habían comprometido. “Conmigo han sido puntuales”, comentó un vecino que repetía ayer por segundo año consecutivo.