Los líderes de ambos sindicatos, que se movilizaron ayer y el miércoles contra la Reforma Laboral, acusaron a la Delegación del Gobierno de “acorralarlos”.
Casi un centenar de personas volvieron ayer a concentrarse frente a la Delegación del Gobierno de la ciudad para protestar contra la aprobación de la Reforma Laboral, que se hizo efectiva en el Congreso de los Diputados. Representantes de UGT y CCOO, que ya se habían movilizado durante la madrugada del miércoles por la misma razón, quisieron mostrar de nuevo su “indignación” con las medidas que el Gobierno llevará a cabo en materia de empleo. El secretario general de UGT en Melilla, Alonso Díaz y la líder de CCOO, Caridad Navarro, criticaron la “excesiva” presencia policial en la Delegación. Pasadas las 12 de la mañana lo ssindicalistas volvían al mismo punto del que se habían marchado ya de madrugada, para reiterar, como ya dijeron el miércoles, “que no pararán de movilizarse hasta que el Ejecutivo dé marcha atrás”. Díaz y Navarro entregaron además en la Delegación un escrito, realizado a nivel nacional, en el que reflejan su rechazo a esta nueva Reforma Laboral, que consideran “el entierro” de los derechos sociales que los trabajadores han adquirido a lo largo de los años. Los líderes sindicales insistieron en que las cifras del paro y los índices económicos demuestran que las medidas llevadas a cabo por el Gobierno de Rajoy “no están sirviendo para nada”. Los máximos representantes de los sindicatos mayoritarios de la ciudad apuntaron que “es el momento de que el Gobierno escuche al resto de los agentes sociales” para poder salir adelante de la crisis económica. Además, señalaron “que no es justo que siempre sean los mismos, los trabajadores, los que paguen las consecuencias de una situación que ellos no han provocado”. Tanto Díaz como Navarro dijeron que las concentraciones de ayer y el miércoles eran una movilizaciones en las que los sindicalistas eran los protagonistas, ya que es “su trabajo y su obligación” luchar por proteger los derechos de los trabajadores. En este sentido, ambos líderes señalaron que “el Gobierno se equivocaba al pensar que los sindicatos no cuentan con el apoyo de la gente” y que si seguían aplicando las políticas que han llevado a cabo hasta ahora “no terminarán la legislatura”. Además, indicaron que la mayoría absoluta no da “legitimidad” al Ejecutivo para “hacer lo que quiera vulnerando los derechos de los ciudadanos”. Por otra parte, Díaz y Navarro criticaron “la excesiva presencia policial” que a su juicio se ha producido en las movilizaciones de esta semana. Cómo ya dijeron durante la noche del miércoles, aseguraron no entender por qué era necesaria tanta seguridad si ellos “siempre han demostrado ser pacíficos y nunca han causado ningún problema”. En este sentido, Díaz recordó que cuando se comenzaron a movilizar hace más de un año, cuando aún estaba en el Gobierno central el PSOE, realizaban sus concentraciones en la misma acera de la puerta de la Delegación, con la única presencia del agente de la Guardia Civil de la entreda. Así, el ugetista aseguró que “el gran despliegue policial” que se está produciendo “desde que llegó esta Delegación, sólo demuestra el miedo del delegado del Gobierno”. Tanto Díaz como Navarro señalaron que esos agentes deberían estar “patrullando en la ciudad” en lugar de vigilar a un grupo de sindicalistas “pacíficos, que lo único que hace es protestar contra una reforma que consideran injusta”. Asimismo, Navarro aseveró que parece que “están esperando que cometamos algún error” para que la opinión pública se ponga en contra de sus revindicaciones. Los dos secretarios generales aseguraron que la presencia de tanta Policía, les hacía sentirse “acorralados” y que no entendían las razones del despliegue Tanto la líder de CCOO como el de UGT señalaron que los sindicatos continuarán reivindicando un giro en las políticas del Gobierno de Rajoy, mientras se continúen aplicando decretos como el de la Reforma Laboral. Así, dijeron que no pararán hasta conseguir que esta reforma dé marcha atrás y los trabajadores recuperen la relación de equilibrio frente a los empresarios.