Gutiérrez dice que tras el rechazo de las enmiendas a la totalidad ahora se inicia el trámite para las territoriales, que permitirán a la ciudad “continuar con sus obras fundamentales”. El diputado del PP por Melilla, Antonio Gutiérrez, se mostró ayer convencido de que Melilla será una de las autonomías “que menos perjudicada va a verse por el programa de ajuste presupuestario” que ahora inicia su fase de presentación de enmiendas territoriales a los Presupuestos Generales del Estado, una vez que ayer fueron rechazadas todas las presentadas a la totalidad por los distintos grupos parlamentarios.
“Las obras fundamentales y las prioridades del Gobierno de la Ciudad estoy convencido de que no se van a ver afectadas y Melilla va a tener la capacidad suficiente para que sus prioridades se vean reflejadas en unos presupuestos como estos, que son presupuestos para esta situación de crisis”, subrayó.
Por ello, rechazó las críticas que desde las filas socialistas se hacen contra los presupuestos y especialmente con el incumplimiento por parte del Gobierno de Rajoy de sus compromisos electorales. Y al respecto dijo que en el Senado, que es donde se presentarán estas enmiendas territoriales, dejará ver “el compromiso que el Gobierno de la Nación tiene con el de Melilla”.
Además subrayó que “no conozco a ningún Gobierno que no quiera invertir”, pero que la situación actual “es de recesión económica” y por tanto, o “se invierte al 100% y ponemos en quiebra el Estado de Bienestar o bien favorecemos éste con políticas de austeridad para garantizar las medidas sociales para los ciudadanos más desfavorecidos”.
Gutiérrez culpó de los actuales presupuestos a la situación dejada por el anterior Gobierno socialista, “que no quiso hacer ni prorrogarlos cuando gobernaba, y no lo hizo para no reconocer la realidad y ese es el motivo de que adelantara las elecciones”, matizó.
Además, defendió estos presupuestos por “la enorme gravedad que tiene España” y porque “lo que quieren es ahorrar para mantener los servicios sociales públicos y de calidad para todos los españoles”.
Dijo igualmente de ellos que “que hoy aseguran el futuro para España, austeros, rigurosos, realistas y adecuados a una situación de recesión, que no hay que ocultar. El Estado de Bienestar cuesta dinero y el PSOE ha dejado a la caja empeñada”, y aseguró que los dirigentes del PP tienen que ser “más contundentes” en sus respuestas a la oposición y “mas claros en lo que dicen, porque sino vamos a tener la culpa de todo”.
Un aspecto que rechazó de pleno y al que contrapuso algunas cuestiones, como por ejemplo, que el Gobierno de Rubalcaba “recortó las pensiones, puso en riesgo la Sanidad y la Educación pública”, por lo que dijo que es “inadmisible que ahora critique las medidas que el Ejecutivo de Rajoy establece para garantizar, precisamente y entre otras cosas, la Sanidad y la Educación”.
En este punto indicó que el PP “ha incrementado la cuantía de las pensiones; la austeridad de los prepuestos inyectará 30.000 millones de euros a las pequeñas y medianas empresas (pymes) o garantiza que los jóvenes sin recursos puedan continuar sus estudios”.
También negó, en materia educativa, que “las becas se vayan a reducir” y subrayó que la partida destinada a éstas “supone el mayor porcentaje de los Presupuestos de Educación”.
Igualmente comentó que se “aumenta la ayuda estatal media para el dependiente”, aunque también dijo que “otra cosa es que el programa de Dependencia sea reestructurado”.
En cuanto a las familias, dijo que el Gobierno del mismo modo ha pensado en ellas y que se ayudará a aquellas que no puedan pagar su hipoteca “gracias al código bancario sobre el desahucio”, proyecto al que dijo que se han sumado el 90% de las entidades bancarias, “que son las que gestionan el 100% de los créditos hipotecarios de estas familias”, comentó.