El Centro Social homenajeó ayer a uno de sus residentes, con la lectura de una carta de sus hijos.
No hay nada cómo una madre... pero tampoco cómo un padre. El centro social de Mayores del Imserso quiso rendir ayer un pequeño, pero emotivo homenaje a uno de sus miembros, Vicente Rincón, aprovechando los actos de celebración del Día del Padre. Hijos, nietos y nueras del hombre se dieron cita en el centro para sorprenderle con unas palabras de cariño que lograron que las lagrimas asomaran en sus ojos.
Los trabajadores del centro de día se habían encargado durante varias semanas de mantener en secreto este homenaje, que sorprendió a Vicente, sentado entre el resto de asistentes al acto, que vio cómo uno de sus hijos, el mayor, salía al escenario para leer una carta.
Vicente Rincón, de 84 años, se abrazó a su hijo y apenas pudo contener la emoción cuando vio a su esposa, Concha, y al resto de su familia, sentados en la mesa central del salón para agradecerle todo lo que ha hecho por ellos durante sus años de vida.
El hijo mayor leyó una carta en nombre de otro de sus vástagos, Antonio, que por motivos laborales no pudo acudir al acto. Todos los asistentes se emocionaron al escuchar las palabras, sencillas, pero sinceras de este hijo, que no hizo más que agradecerle a su padre, precisamente eso, haber sido su padre. Y es que hay palabras que tienen por sí solas un significado profundo, un padre, cómo explicaba Antonio en la carta, es el que trabaja para sacar a sus hijos adelante, el que está a su lado cómo compañero, amigo y maestro y el que trata de tapar a fuerza de cariño los problemas con los que sus descendientes se van enfrentando a lo largo de la vida.
Para los hijos de Rincón, como para los de otros muchos padres, su progenitor ha sido el mejor que podrían haber tenido.
De Vicente, que ha vivido en Tetuán, Morón y finalmente en Melilla y que ejerció como maestro, sus hijos destacaron su ingenio, su sentido del humor y su ironía.
También tuvieron palabras de cariño para su madre, que ha acompañado a Vicente durante más de sesenta años en la labor de criar a sus hijos y en la de vivir, superando todas las dificultades y tendiendo siempre la mano a sus hijos cuando los necesitan.
“Habeis cumplido cómo padres”, aseguraron en su carta, una afirmación, que sin duda, cualquier padre querría oír de sus hijos.
Vicente, que trató de contener las lágrimas, se fundió en un abrazo con su hijo, al que agradeció la sorpresa y el reconomiento público.
Después del homenaje, en el que estuvo presente la directoria territorial del Imserso, Isabel Quesada, el dúo ‘Ole tú’. interpretó varias coplas sobre el escenario del salón, también dentro del programa de actividades del Día del Padre organizadas por el centro de día.