Se sienten “presionados y deprimidos” al no saber cómo se encuentran sus familiares. La tensión política y la violencia en su país mantiene a muchas zonas incomunicadas.
Los 30 inmigrantes de la República Democrática del Congo que protestan frente a la Delegación del Gobierno de Melilla presentaron en la jornada de ayer un escrito en el que solicitan al máximo dirigente de esta institución, Abdelmalik El Barkani, que les traslade en el menor tiempo posible a la península, alegando para ello a razones humanitarias.
En la misiva que presentaron, también detallan en qué situación se encuentran en la actualidad. Al margen del tiempo de espera en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), señalan que la situación en su país, “que se encuentra al borde de la guerra civil después de que se celebraran unas elecciones fraudulentas”, les impide estar en contacto con sus familias, lo cual empeora su “presión psicológica”.
“Hay zonas del país incomunicadas, no sabemos qué ocurre y tenemos mucha ansiedad”, señaló una de los portavoces del grupo a este periódico. Asimismo, afirmaron en el escrito que algunos de ellos están cayendo víctimas “de fuertes depresiones” a causa de la incertidumbre.
Además, explican lo expuesto a El Faro en los últimos días: Que se sienten agraviados ante el hecho de que otros inmigrantes hayan podido salir de la ciudad autónoma rumbo a la península pese a que llevaban menos tiempo que ellos en el CETI.
Por otro lado, uno de los congoleños afirmó que también han pedido una reunión a El Barkani para tratar su situación, aunque desde Delegación del Gobierno indicaron que esta demanda no ha sido incluida en la carta que han presentado.
La postura por parte de Delegación en este asunto continúa siendo la misma que en los últimos días: Respetar los tiempos que marca la Ley de Extranjería al respecto. Además, desde el Gabinete de Prensa recordaron que los traslados a la península no se realizan de manera arbitraria y que dependen del caso concreto de cada colectivo de inmigrantes.
Los congoleños sumaron ayer su tercer día de protesta frente a la sede de la Delegación del Gobierno y aseguran que no abandonarán el lugar hasta que se les ofrezca una salida a su situación. Su objetivo es llegar a la península para poder trabajar y mandar dinero a sus familias.
Tres noches al raso y sin ánimo de abandonar.
Los inmigrantes congoleños del CETI iniciaron su protesta de manera espontánea, según afirman ellos mismos, el pasado lunes, cuando acudieron a la Delegación del Gobierno en busca de una solución para poder salir de Melilla. Muchos hablaron aquel día de realizar una sentada permanente y finalmente ésta fue la opción que han escogido para protestar. No obstante, hay que recalcar que no todos pasan la noche frente a la sede de la Delegación del Gobierno, pues aproximadamente la mita retorna al CETI y vuelve a la Plaza de España a la mañana siguiente.
El caso comienza a parecerse al de los inmigrantes de Bangladesh, que no dudaron en acudir a la Plaza Menéndez Pelayo todas las semanas hasta que les trasladaran a la península, objetivo que finalmente consiguieron tras muchos meses de demanda.
La de anoche fue la tercera que los congoleños pasan al raso frente a la Delegación del Gobierno. Aseguran que no pararán hasta salir de la ciudad.