La institución, que preveía las contrataciones en sus presupuestos de 2012, no podrá hacerlas de acuerdo con el decreto aprobado por el Gobierno central.
La Universidad de Granada tratará de negociar con el Gobierno la aplicación de su primer decreto (Real Decreto Ley 30/2011), por el que se congela la oferta de empleo público de todas las administraciones para 2012.
La UGR, que presentó sus presupuestos para este año hace apenas un mes, contemplaba ya en este documento la oferta de trabajo para 2012, que incluía las nuevas contrataciones de 70 profesores ayudantes-doctor, 15 profesores asociados y 67 interinos. Además de 60 promociones internas de titular a catedrático para el personal docente investigador, 75 de doctor a titular, 15 de estabilización de investigadores.
De acuerdo con el nuevo decreto, estas contrataciones quedarían en suspenso ya que la oferta aún no había sido publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Según indica desde la institución educativa el vicegerente de Recursos Humanos, Marciano Almohalla, la Universidad de Granada cerró sus últimos presupuestos sin déficit, por lo que están estudiando la forma de que se pueda hacer una excepción y se les permita realizar contrataciones durante este año.
En este sentido desde la UGR aseguran que ellos se han encargado de tomar sus propias medidas para hacer frente a la situación económica y que gracias a ello han conseguido no sólo cerrar sus cuentas en positivo sino que además, no deber en la actualidad ningún préstamo a entidades financieras.
Así, el vicegerente apunta que cuando en los presupuestos de 2012 se contemplaron las contrataciones de nuevo personal es “porque la Universidad tiene recursos suficientes para hacer frente a estos nuevos empleos”.
Además indicó que la aplicación de la normativa estatal podría provocar problemas en la organización de la institución ya que, por ejemplo, no permitiría la sustitución de personal cuando se produjeran bajas, según Almohalla.
No obstante desde la UGR quisieron apuntar que este nuevo decreto no implica que se vaya a producir ningún despido, aunque sí puede implicar la no renovación de contratos.
Asimismo indicaron que la oferta pública correspondiente a 2011 y que ya se publicó en el BOE sí seguirá adelante hasta que se cubran las plazas que se ofertaron en su momento, aunque confirmaron que mientras que no se produzca ninguna variación en el decreto, la UGR, al igual que el resto de las administraciones públicas, tendrá que suspender la convocatoria de oferta de empleo público de 2012.