Esta usuaria sufrió una crisis nerviosa, por lo que fue atendida por una psicóloga de la Consejería de Bienestar Social y Sanidad y trasladada al Hospital Comarcal.
Una mujer se roció ayer con gasolina en uno de los despachos de la Consejería de Bienestar Social y Sanidad de Melilla, en el que era atendida por una trabajadora social, según confirmó la titular de esta área, María Antonia Garbín.
La consejera destacó que esta señora era una usuaria de los servicios sociales y que cuando decidió rociarse con esa botella de gasolina se encontraba hablando con una trabajadora social, aunque afortunadamente no llevaba un mechero o prendedor encima, por lo que el incidente no fue a mayores.
No llevaba encendedor
La mujer, joven y con hijos a su cargo, es usuaria de los servicios sociales y era atendida para dar una solución a su situación.
Los hechos se produjeron sobre las 11:30 horas, según informaba Efe, en las dependencias autonómicas situadas en la calle Carlos Ramírez de Arellano, cuando, en un momento determinado, la mujer se ha puesto nerviosa, según las fuentes consultadas por Efe.
Garbín comentó que sufrió una crisis nerviosa, pero que afortunadamente una psicóloga de la Consejería consiguió tranquilizarla, de forma que se alertó a todo el personal en el momento que se produjo este incidente.
Según la información facilitada por Efe, la mujer no llevaba encima ningún encendedor, y se desconocen los motivos por los que se echó la gasolina.
Intenciones desconocidas
Asimismo, la consejera de Bienestar Social y Sanidad destacó que las intenciones de esta mujer se desconocían, aunque se encontraba en el Hospital Comarcal donde fue trasladada tras sufrir esta crisis nerviosa.
Garbín insistió en que la incidencia no fue a más, pero que en aquellos instantes les preocupaba que la mujer sufriera algún tipo de daño con esta acción.