Los melillenses se impusieron al Lleida Basket por 86-80 en un choque trepidante
El Melilla Baloncesto mantiene su condición de invicto en el Javi Imbroda Ortiz y cierra el año sin saber lo que es la derrota en su cancha de juego. Los melillenses se impusieron al Lleida Basketbol por 86-80, en un choque que dominó el conjunto de Gonzalo García durante los tres primeros cuartos.
El choque arrancó con un equipo catalán muy metido en el choque que hizo suyos los primeros compases. Ramsdell demostró su potencial desde lejos y con un triple marcó una pequeña diferencia 2-5. Hasta mediados del cuarto el equipo de Gonzalo García no cogió la batuta de mando. Con 11-11 en el electrónico Salva Arco destapó el tarro de las esencias y el alero melillense se mostró imparable desde la lídea de 3 puntos. Troy no podia ser menos y el norteamericano secundó perfectamente el juego de su compañero. Con un triple de Arco y tres puntos deTroy desde la lñinea de personales los melillenses se pusieron 21-15, a falta de 2’41”. Los hombres de Gonzalo García controlaban el juego y un triple de Devries dejaron el marcador en 28-20.
En el segundo cuarto los locales no sólo se hicieron dueños del juego en ataque con continuas acciones de dentro-fuera, sino que la defensa melillense rozó un excelente nivel, parando a,los hombres importantes leridanos. Ramsdell lo intentó desde fuera, pero un imparable Arco y un acertado Odiakosa dejaron con pocas opciones a los catalanes que se marcharon al descanso con eleclectrónico en 48-37.
La salida de los vestuariuos de los locales fue espectacular, Arco estaba para romper estadísticas y así lo hizo, el alero melillense volvió a demostrar su acierto en el perímetro, pero no solo desde la línea de tres puntos, sino que reboteó, penetró y defendió. Un triple de Troy pusieron el marcador en 61-45 a falta de 5’16”, lo que hizo solicitar un tiempo muerto al técnico catalán Ricard Casas. Pero Melilla, estab enchufada y un nuevo triple de Manzano pusieorn 19 punto de diferencia en el electrónico 64-45. Una jugada de dos más uno de Detrick volvieron a dar esperanzas al equipo catalán, 64-48. Pero el equipo Gonzalo García no estaba dispuesto a ceder diferencias y dos canastas consecutivas de Wachsman devolvieron la diferencia los locales, 70-48. Casas intentó con un njuevo tiempo muerto parar la avalancha de los melillenses, pero dos nuevos puntos de Wachsman sobre la bocina dejaron el electrónico en 72-51.
Los últimos diez minutos fueron de auténtica locura, con un conjunto catalán que salió dispueto a hacer la ‘machada’ y un equipo local que vio peligrar su diferencia. Un parcial de 0-12 con el marcador en 76-56, dejaron las cosas en 76-98, a falta de 5’10” con tiempo muerto incluido de Gonzalo García. Los melillenses no lograban parar al equipo leridano, que en el uno contra uno sacó toda la ventaja posible. Con 82-80, a falta de 1’22” para finalizar el choque, entraron los miedos en el pabellón Javier Imbroda, pero el Melilla Baloncesto supo tirar de casta y veteranía para dosificar el tiempo y el marcador, esta vez, la lñinea de tieros libres no fue ‘maldita’ para el equipo melillense y Manzano a falta de 31 srgundos y Marco con el tiempo cumplido hicieron pleno, para dejar el resultado en 86-80.