Esta ONG realizó ayer en La Salle-El Carmen una gala benéfica con la que recaudaron dinero para la sede, ya que no reciben ninguna subvención para costear estos gastos.
Todos los padres, madres, abuelos y niños que acudieron ayer a la gala benéfica de ayuda a Melilla Acoge corrieron por los pasillos de La Salle-El Carmen para coger los mejores asientos y disfrutar así del magnífico espectáculo del que ayer disfrutaron en el salón de actos. Cuenta cuentos, baile, música, pinturas, popas de jabón y la visita de dos graciosos muñecos fueron algunas de las actividades que divirtieron a los pequeños, y también los mayores, ya que pocos se resistieron a bailar y cantar con la excusa de animar a sus hijos o nietos. Fue una fiesta que divirtió con mayúsculas a todo el público y un gesto solidario de los mayores, ya que con el coste de la entrada, cinco euros, ayudan a Melilla Acoge a continuar con su actividad en la ciudad.
El espectáculo empezó a las 18:00 horas con los talleres de pintura para la cara, lo que dio como resultado que en pocos minutos, en vez de niños hubiera en la sala mariposas, tigres, spidermans, batmans y mucha brillantina. Todos estos ingredientes sumados a un gran número de espadas-globo repartidas por todos los rincones, así que, de vez en cuando, se organizaban duelos en los pasillos e incluso, entre hermanos.
Los cantajuegos formaron parte de las primeras actividades de la tarde, ya que siguiendo los bailes el público comenzó a reír sin parar.
Además, los dos presentadores de la gala hicieron una demostración de cómo se podían hacer popas de jabón gigantes e incluso llamaron a uno de los chicos del público para que lo comprobara.
La visita de dos muñecos revolucionaron la sala, Luigi y Mario, dos graciosos fontaneros que desataron las travesuras de los chicos que no perdieron la oportunidad de batirse en duelo con ellos a pesar de que no poseían espadas-globo.
Más tarde llegó el turno de Papá Noel, quien hizo una entrada triunfal con una bolsa llena de caramelos. El señor Noel explicó a todo el público que en unos días visitaría sus casas para dejar algún que otro regalito, aunque todo eso dependiera de si se portaban bien o no en casa y en el colegio.
Y con esta visita se dio paso a las actuaciones de los grupos de baile de la academia de Dori y Juan, que sorprendieron a los niños y también a los adultos con sus piruetas y sus cambios de pies.
En total, se realizaron ocho actuaciones diferentes y para finalizar la gala, el grupo de villancicos de Aspanies cantó con alegría para todo el público.
Necesidades de la ONG
La gala optó por una metodología participativa en la que los niños colaboraron y se implicaron en cada una de las actividades, y de esta forma, consiguieron que hasta el más travieso parara en su asiento o cantara al compás que el resto de sus compañeros y amigos.
El presidente de Melilla Acoge, Armando Andrés Fernández, explicó al comienzo de este evento que esta ONG dedicaba todos sus esfuerzos en ayudar a los inmigrantes, esas personas que arriesgaban sus vidas, dejaban atrás familia, amigos y su cultura para llegar a esta nuestro país con la esperanza de tener un futuro mejor. De esta forma, aseguró que la ONG a lo largo de los 17 años de trabajo había ayudado a integrar a estas personas en la sociedad, para que fueran considerados un ciudadano más.
Comentó que la crisis económica está afectando a todos los sectores y también les ha llegado a las entidades sociales que están viendo cómo las subvenciones que recibían han disminuido este año. Entre ellas, la ayuda con la que realizaban los pagos corrientes de la sede de Melilla Acoge, como la luz, agua, alquiler y teléfono, por lo que desde hace un año, los voluntarios y los trabajadores reúnen dinero para solventar todos estos costes.
La entidad también cuenta con una fila cero en la cueta bancaria de La Caixa 2100 1891 79 0200045513, para que todos los melillenses que deseen colaborar aporten su granito de arena.
Melilla Acoge tiene una serie de programas que están financiados por la Ciudad o por el Estado, pero no es suficiente para que la ONG pueda seguir operando y favoreciendo la integración de los inmigrantes.
“Estamos intentando salvar esta dificultad y cada vez se hace más complicado, por ello se propuso realizar una gala en la que, además de mostrar la labor que hacemos ofreciéramos al público una actividad en una época como la Navidad y que también nos sirviera para reforzar el mantenimiento de la asociación y subsanar un mes o dos el alquiler”, aseguró la coordinadora de Educación de esta entidad.
Es la primera vez que se realiza la gala para este objetivo. El pasado año ya se realizó un evento de estas características aunque el dinero recaudado fue en beneficio de los damnificados por el terremoto de Haití.
Al principio de verano también organizaron un torneo benéfico de pádel para apoyar al mantenimiento de la asociación, que se suma a la cuota que entre voluntarios, simpatizantes y trabajadores pagan cada mes.