El Gobierno local defiende que la medida se debe a la mala situación económica que atraviesa la empresa de transporte. La tarifa individual pasa a costar 85 céntimos de euro.
La Comisión de Economía celebrada el pasado martes aprobó, con los votos a favor del Partido Popular (PP), un incremento en el precio de las tarifas del transporte urbano. De este modo, y a falta de que la iniciativa sea aprobada definitivamente por el Pleno de la Asamblea, el precio de los billetes del servicio público de transporte se encarecerá en diez céntimos de euro.
Así lo anunció el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno melillense, Daniel Conesa, ante los medios de comunicación locales. Además, precisó que la subida afectará a las distintas modalidades de billetes que existen actualmente, por lo que el individual pasará de 75 a 85 céntimos de euro y el de los bonos de 65 a 75 céntimos.
La medida fue propuesta por la empresa adjudicataria del servicio, la COA, la cual se encuentra en una situación económica “bastante delicada”, según apuntó el consejero. “Su número de pasajeros se ha reducido en los últimos tiempos y el precio del combustible se ha disparado”, destacó.
Por otro lado, recordó que la última subida en el precio de los billetes tuvo lugar en febrero del 2010, y que desde ese momento el IPC acumulado en el sector del transporte público ha sido del 14,6%. “Con estos datos en la mano, podemos afirmar que no se trata de una subida excesiva”, opinó Conesa.
También quiso rebatir algunos de los argumentos planteados por los partidos de la oposición en la Comisión de Economía, pues, por ejemplo, Coalición por Melilla (CpM) afirmó que la medida perjudicaría a los sectores sociales económicamente más débiles, pues consideraron que ellos son los principales usuarios de la COA. No obstante, para Conesa “se trata de un enfoque completamente erróneo y poco objetivo”.
“No creo que los más desfavorecidos sean los principales usuarios del transporte público”, recalcó, “lo que sí es un hecho es que la empresa que presta este servicio se encuentra en dificultades a causa de la crisis”. Además, recordó que la Ciudad Autónoma oferta bonos de transporte a precio especial para algunos de los colectivos sociales más necesitados.
En cuanto a los votos en contra de los partidos de la oposición a la subida de las tarifas, afirmó que comprendía su postura, pues era “la más cómoda”. No obstante, quiso agradecer que no se hiciera una “crítica feroz” de la medida.
El nuevo contrato, en camino
Al hilo de esta cuestión, el consejero señaló que ya se han iniciado los trámites para redactar el nuevo pliego de condiciones para el servicio de transporte público, el cual se adjudicará a finales del 2012, aproximadamente, si se cumplen los plazos establecidos.
Por el momento, se ha encargado a una consultora la redacción de un borrador en el que se detallen las mejores condiciones para modernizar el transporte urbano en Melilla. “Hay que mejorar aspectos como las paradas, las líneas, los vehículos y los sistemas informativos”, detalló Conesa, “el actual modelo ha ido evolucionando desde hace 50 años, pero ya está completamente obsoleto”.
La intención del Gobierno local en este terreno es que en la confección del nuevo pliego participen el mayor número de voces posibles.
Así pues, además de enviar un borrador del mismo a los partidos de la oposición, lo cual podría ocurrir a lo largo de los tres primeros meses del 2012, también se hará partícipe a los principales agentes sociales y económicos de la ciudad autónoma.
Poca información añadió el consejero sobre los principales puntos que contendrá el contrato, pues subrayó que el asunto está todavía gestándose. No obstante, señaló que el plazo máximo de adjudicación, que está regulado por Ley, es de diez años. Sobre el coste de la adjudicación, recalcó que dependerá de la recaudación de la prestación del servicio.
“El horizonte que nos marcamos en este terreno es el de la sostenibilidad”, aseguró Conesa, “es un tema complejo y complicado, y que además requerirá de un esfuerzo económico por parte de la Ciudad Autónoma, pero es necesario que Melilla cuente con un transporte público moderno”.
En cuanto a la posibilidad de que se presenten al concurso público más empresas además de la Coa, señaló que no cierran la puerta a la llegada de nuevas compañías, aunque opinó que la actual está en una situación muy ventajosa para volver a hacerse con la adjudicación, ya que cuenta con una infraestructura en Melilla de la que no disponen otras empresas. “Es un hecho de que su implantación en la ciudad es total”, señaló.
A preguntas de los periodistas, negó de plano que el Gobierno local esté estudiando la posibilidad de que la Coa pase a ser una empresa municipal si su situación económica continúa deteriorándose, aunque afirmó que dentro del nuevo pliego se incluirá algún punto para cuidar la estabilidad laboral de su plantilla, compuesta de unos 54 trabajadores.