Guión previsto La escuadra melillense cumple con los pronósticos y sigue recortando distancias con la cabeza Dinámica positiva El conjunto azulino encadena su sexta jornada sin perder.
La UD Melilla se impuso por 0-2 en un partido cómodo disputado en campo del Polideportivo Ejido, donde había perdido en sus últimas tres visitas. Los dos tantos fueron logrados por un inspirado Chota, en la primera parte que fue netamente melillense. Tal renta hizo que los pupilos de Óscar Cano se acomodaran en el segundo período, ante un Poli que empujó algo más pero sin ningún peligro de cara a la meta de Munir, quien apenas tuvo trabajo.
El dominio inicial correspondió a un Melilla que a base de toque, se iba acercando al área local aunque sin demasiada fortuna, bien porque la defensa celeste abortaba cualquier atisbo de peligro, con el guardameta Dani Miguélez muy seguro en sus salidas cuando éstas se requerían. Fue en el minuto doce cuando el conjunto melillense decidió que era hora de chutar a puerta y aprovechando un resquicio de la zaga del Poli, Edgar chutó pero el balón impactó en el lateral de la red por fuera.
Dicha acción se convertiría en un aviso, ya que en el catorce, un despiste defensivo local habilitó el que Chota se quedara frente a la portería de Dani Miguélez, al que el delantero y capitán del Melilla batió sin complicaciones de fuerte disparo, colocando el 0-1 en el marcador de un Estadio de Santo Domingo que enmudecía demasiado pronto, al no haberse cumplido ni un cuarto de hora de partido.
El control del juego seguiría siendo para el cuadro que dirige Óscar Cano y de hecho, Chota volvió a inquietar a la meta celeste, cuando encaraba solo a Miguélez se entretuvo y Pepe le 'birló' la pelota antes de que regateara al cancerbero y chutara.
Un poco más tarde, el Poli gozó de hasta tres saques de esquina consecutivos, no aprovechando ninguno de ellos. Quien no desperdiciaba oportunidad de amonestar era el colegiado Pintado Calero, pues tres futbolistas celestes ya habían visto amarilla, aunque ni mucho menos estaban siendo excesivamente duros.
Entrando en el último tramo de la primera parte, a balón parado llegarían las siguientes ocasiones, una para cada equipo; primero, el Poli casi marca gol olímpico, algo que evitó Munir estirándose hacia el primer palo y luego, Katxorro ejecutó un saque de falta que se perdió por encima del larguero. Más clara fue la oportunidad que Chota tuvo en sus botas en el 37, pero no acertó a meter el balón entre los tres palos con todo a su favor.
En cambio, el goleador dejó ver que iba a ser su mañana y no falló a escasos segundos del descanso, al remachar de cabeza y sin oposición en el segundo palo. Con el 0-2, ambos contendientes tomaron camino de vestuarios, notándose mejores ánimos en las filas de la UD Melilla, con un resultado tan favorable como claro.
Durante el interludio, el entrenador Héctor Berenguel dio entrada al juvenil Antonio, sustituyendo al también canterano Dani Cara en la banda derecha. El Poli, arengado por su hinchada al saltar al campo para la reanudación del choque, comenzó con más brío del que se le había visto en los primeros 45 minutos, mientras que el Melilla, bien respaldado por su renta, tampoco renegó a la hora de crear acciones ofensivas.
No había duda alguna de que el cuadro melillense estaba ganando con autoridad y merecidamente, pero el árbitro quería robarle protagonismo a los de Óscar Cano, al mostrar otras dos absurdas e innecesarias amarillas a jugadores locales, como al juvenil Carlos, por acercarse al banquillo -sin llegar a cruzar la línea del terreno de juego- a que le untaran un poco de crema anti-inflamatoria por un golpe y en la protesta, el meta suplente Álvaro también fue expulsado. Todo esto ocurrió mientras el juego estaba detenido precisamente por una mano de un defensor visitante, que, en cambio, no fue merecedora de cartulina según el árbitro valenciano.
Entre éste y otros lances, el tiempo pasaba y el Melilla continuaba cómodo, con el Polideportivo Ejido siendo más incisivo pero sin hacer daño. Óscar Cano dio descanso al ex celeste Katxorro, ovacionado por la que fue su afición durante las dos temporadas anteriores y dejó su puesto a Nacho Aznar; por parte local se agotaron los cambios, entrando Prieto por Saúl y otro juvenil más como Joseíllo, por Carlos. Se había superado el minuto 80 en Santo Domingo y para refrescar al Melilla saltó al césped Luis Ángel, en sustitución de Rubén Cruz.
Prácticamente la segunda mitad se había convertido en un 'quiero y no puedo' celeste y como prueba de ello, el remate de cabeza de Cantarutti que se marchó desviado, cuando el ejidense estaba libre de marca en el segundo palo. El Melilla agotaría sus cambios, entrando el ex del Poli, Zamorano por Solabarrieta. Fue lo último destacado del encuentro, que concluyó con el justo 0-2 a favor de los de la Ciudad Autónoma.