Los más de 45.000 melillenses de confesión islámica ya se encuentran celebrando el Eid al Adha y, como no podía ser de otra forma, esta fiesta grande para la comunidad musulmana no puede festejarse de manera completa sin el tradicional sacrificio de los borregos de la Pascua.
Si bien es tradición que cada familia sacrifique a su cordero en el domicilio particular, muchos no pueden hacerlo debido a la falta de un espacio adecuado para llevar a cabo esta acción. Además, la capacidad del Matadero Municipal es limitada ante los miles de sacrificios que se realizan en el día de hoy en Melilla. Por este motivo, la Ciudad Autónoma ha instalado 9 puntos de sacrificio en 5 barrios distintos de Melilla, para que los vecinos que así lo deseen puedan llevar a su borrego y sacrificarlo, así como desollarlo, para llevar su carne a sus respectivos hogares.
Asimismo, se cuenta con la presencia de 18 operarios de limpieza y 2 veterinarios en el conjunto de todas las carpas, quienes se van rotando por los distintos puntos. Los operarios se encargan de la limpieza entre sacrificio, para que se cumplan las mayores condiciones posibles; mientras que los veterinarios certifican que se cumplen las condiciones de bienestar animal. En cada punto hay tomas de agua, sumideros y desagües, así como ganchos para que la carne no toque el suelo.
Como manda la tradición, fue acabar el rezo y las familias fueron llegando hasta las carpas. Los ciudadanos han tenido a su disposición 9 carpas instaladas en las barriadas de Tiro Nacional, Cabrerizas, Averroes, Monte María Cristina y Las Palmeras.
Melillenses de todas las edades llenaron los distintos puntos de sacrificio. Mientras los más pequeños jugaban o aprendían de este ritual, el cabeza de familia se encargaba del sacrificio, contando con la ayuda de su esposa y de otros vecinos en muchos casos.
En el caso de Yamal, este ciudadano melillense conversó con este medio recordando la importancia de esta festividad para los musulmanes. Yamal llegó con su borrego y acompañado de su familia. Pese a que él se encargó del sacrificio, contó con la ayuda de más personas para el posterior despiece del animal para poder llevarse la carne a su hogar y celebrar la Pascua junto a sus seres queridos, tanto hoy como los próximos días.
Tras los pertinentes sacrificios, los melillenses se han desplazado hasta sus hogares para preparar los platos típicos, compartiendo un ambiente de fraternidad y unión en la fiesta más grande del mundo musulmán.
Consejera
A las pistas deportivas del Tiro Nacional acudió la consejera de políticas Sociales y Salud Pública, Randa Mohamed, quien en declaraciones a los medios, puso en valor esta iniciativa, recordando que la capacidad del matadero en una jornada como la del Eid el Kebir es limitada. Pese a no tener datos concretos del número de animales que se sacrificarán en dichas instalaciones, se baraja una cifra de 80 corderos de la Pascua.
La consejera aprovechó para felicitar el día a la comunidad musulmana de Melilla, recordando la importancia del Eid. Un día, dijo, donde los musulmanes tienen la obligación de ofrecer un sacrificio a Dios.
De cara al próximo Eid el Adha, la Ciudad Autónoma se ha propuesto ampliar el número de puntos de sacrificio en Melilla. De hecho, este año se había previsto instalar una carpa en el barrio del Real. No obstante, no pudo llevarse a cabo, una vez que el lugar donde se tenía pensado establecer dicha carpa no contaba con tomas de agua ni desagües.
Randa Mohamed aseguró que para el año que viene tendrán en cuenta las instalaciones adecuadas para fijar un lugar idóneo en este punto de nuestra ciudad.
Veterinario
Fueron 2 los veterinarios que fueron desplazándose por los distintos puntos de sacrificio establecidos por la Ciudad.
Su labor consistió en controlar el bienestar animal, la identificación de los distintos corderos para fijar que provengan de ganaderías autorizadas, así como asesorar a los vecinos sobre el estado sanitario de sus borregos o sus vísceras.
En declaraciones a El Faro, el veterinario Ricardo Arenas aseguró que su principal ocupación era controlar que el animal no quedase expuesto al sol así como tratar de evitar situaciones de maltrato, en caso de que se dieran.
"Venimos desde primera hora hasta que se sacrifica el último animal".
Asimismo, afirmó que su labor se centraba en controlar el origen de los corderos mediante el crotal, pendiente identificativo en la oreja del animal.
Sacrificio
El Eid al-Adha es la mayor celebración del Islam. En esta festividad se conmemora el sacrificio del profeta Ibrahim. Siguiendo los designios de Dios, dispuesto a sacrificar a su propio hijo, el profeta Ismail, como prueba de fe; Dios lo paró y remplazó a su primogénito por un cordero.
Complacido por la fuerte fe de Ibrahim, Dios hizo de esta demostración una parte permanente de la vida de cualquier fiel. Por ello, ese día, los musulmanes de todo el mundo sacrifican un animal, bien sea un borrego, cabra o incluso camello, para honrar el sacrificio del profeta Ibrahim.