La comunidad hebrea de Melilla se encuentra celebrando desde la tarde de ayer martes, día 11, hasta mañana jueves, día 13; la festividad del Shavuot, en la que es la segunda de las 3 fiestas de peregrinaje del judaísmo, tras el Pésaj y antes del Sucot.
Como cada año, el Shavuot se está conmemorando exactamente 7 semanas después del segundo día del Pésaj. En esta festividad se recuerda la entrega de la Torá a Moisés por el todopoderoso, hecho que tuvo lugar en el Monte Sinaí durante el éxodo del pueblo judío.
De acuerdo con la ley judía, el Shavuot queda establecido como jornada no laborable. En el caso de la diáspora judía, esta festividad se conmemora a lo largo de dos días, al contrario que en Israel donde tan sólo se desarrolla en una jornada.
Es típico ingerir alimentos con productos lácteos en esta festividad, aunque deben ir acompañados de los 7 especies, o productos especiales de Israel: Trigo, cebada, uvas, higos, granadas, aceitunas y dátiles.
Las familias acuden a la sinagoga para que escuchen la lectura de los Diez Mandamientos. Posteriormente, las familias y amigos se reúnen a celebrar esta conmemoración, mayormente en eventos al aire libre.
No obstante, el Shavuot también posee un significado agrícola, una vez que coincide con la época en la que se recogen las primeras cosechas. Antiguamente, los fieles llevaban los primeros frutos al Templo de Jerusalén para ofrecérselos a Dios, por lo que también se conoce al Shavuot como la 'Fiesta de las Primicias'.
Shavuot en hebreo significa 'semanas', porque se celebra siete semanas después de celebrar la salida de Egipto y el paso de la esclavitud a la libertad, hecho que se recuerda en la fiesta de Pésaj.
Significado
El libro de Levítico, en el capítulo 23, recoge la instauración y el nacimiento de esta festividad y la ceremonia que gira en torno a la misma, además de incidir en cada uno de los pasos que se tenían que respetar para la correcta conmemoración de esta celebración.
Su connotación espiritual es el fundamento de su consagración como fiesta santa o ‘Santa convocación’.
El ofrecimiento de los primeros frutos y la gavilla (omer) de las primeras espigas de la cosecha representa el reconocimiento de Dios como proveedor de todas las cosas y como el Señor de su pueblo.
Parece una inocentada de lo hermanos Grimm