Se quedan de que cuando visitó el hospital no acudiera al servicio más conflictivo y saturado. Según el personal de Tocoginecología, el delegado del Gobierno, Antonio María Claret, tras visitar recientemente el Hospital por primera vez “no acudió a conocer in situ uno de los servicios más conflictivos y saturados como es el nuestro. Seguimos esperándolo para trasmitirle una realidad que no se maquilla con cifras y datos estadísticos y que estamos sufriendo día a día”.
“Somos conscientes de que hay que atender a todas las mujeres embarazadas, pero no podemos poner en riesgo un servicio que puede acabar desmontándose si no se toman medidas, porque todo no es atender partos, hay mucha otra casuística que atender y también tenemos que hacer frente a las consultas”.
Por todo ello, que la dirección del INGESA se limitara a acallar las denuncias por saturación en el ‘Comarcal’ alegando que el grado de ocupación del centro hospitalario es de poco más que el 60%, suena a broma pesada en Tocoginecología y en otros servicios como Urgencias, igualmente saturado.
Soluciones posibles
Para la plantilla del Hospital, con independencia de su rango, faltan medios y hay que contratar más personal, pero además hay que buscar una solución de futuro con vistas a la apertura en unos años del nuevo Hospital Universitario. “De nuevo, no puede programarse en atención a la demanda de la ciudad de Melilla, cuando en realidad estará llamado a atender también mucha demanda asistencial proveniente del otro lado de la frontera. El actual Hospital Comarcal deberá seguir funcionando y no es una locura que se destine un centro de Tocoginecología para extranjeras procedentes de Marruecos”.