El colectivo ecologista Guelaya ha vuelto a recordar que cualquier animal silvestre que se encuentre en una zona habitada debe ser retirado por especialistas, razón por la que deja claro que es necesario llamar al 112 para que proceda en estos casos. Aludía así a la aparición de una culebra en el centro penitenciario, lo cual ocasionó duras críticas de los sindicatos de los funcionarios hacia la gestión del director del centro, al que acusan de "dejadez", entre otras cuestiones.
En ese sentido, Guelaya ha puesto de manifiesto que "una vez más, la aparición de una culebra de herradura en un lugar habitado provoca una reacción fuera de lugar. Pero esta vez ha sido además en un edificio público, donde el conocimiento de la ley y su cumplimiento debería ser la norma", señala.
Por eso, reitera que para retirar un animal silvestre de una zona habitada es obligatorio avisar al 112 y con más razón "tratándose de una culebra", por cuanto son animales protegidos por la ley por estar catalogados de "utilidad pública". "El centro penitenciario de Melilla no está lejos de zonas naturales como los acantilados de Horcas, o el polvorín y las culebras de herradura, totalmente inofensivas, tienen tendencia a entrar en las zonas habitadas, máxime si como indica la noticia en esas zonas proliferan las ratas, que son presas naturales de las culebras".
Para los ecologistas melillenses es "la presencia de estas ratas la debería ser el motivo de la queja de las personas que trabajan allí, pues suele indicar falta de higiene". "Al quejarse de la aparición de una culebra en los términos que lo hacen, contribuyen a relacionar a estos animales con la falta de higiene, lo que no hace sino alimentar los prejuicios sobre esta valiosa fauna silvestre, cada vez más escasa por culpa de dichos prejuicios, más relacionados con la superstición que con la realidad", añaden.
Según afirma Guelaya, en la ciudad hay personas concienciadas con el valor de la cada vez más escasa fauna silvestre "que acudimos encantadas al rescate de esta fauna cuando se nos llama y en esta ocasión lo hubiéramos hecho con más razón; por muchas experiencias anteriores sabemos que las culebras no salen bien paradas de estos encuentros con humanos".
"Desde Guelaya volvemos a insistir que las culebras de herradura son inofensivas, y que no hay ninguna especie de ofidios peligrosa en Melilla. Y que para cualquier incidencia con fauna silvestre hay que llamar al 112", solicitan los ecologistas.