Miguel Mimbela comenzó, el pasado mes de octubre, una vuelta ajedrecista a España. La idea nació justo después del estado de alarma por la pandemia, cuando los profesores de ajedrez y de música –él también lo es de esta disciplina- tenían que buscarse la vida para dar clases. El primer día que pudo salir subió desde Zaragoza –de donde es originario- a los Pirineos y lo pensó mientras bajaba, ya que hoy día, a través de un móvil, se puede llegar a todo el mundo y promocionar el ajedrez y, de paso, España.
Lo que hace exactamente es retransmitir en directo, durante una hora, los sábados y los domingos, a través de Twitch a sus alumnos. Para ello, elige los aspectos emblemáticos de cada ciudad –que pueden ser artísticos, geográficos o gastronómicos- y los compara con un tema de ajedrez. En sus propias palabras, “es como una especie de clase, pero España es el tablero de ajedrez y el aula”.
En su recorrido por las 50 provincias y las dos ciudades autónomas, este domingo ha llegado a Melilla –número 36 de su ruta- y, mientras daba su clase, ha ido por la Avenida Juan Carlos I desde la Plaza de España hasta Menéndez Pelayo y luego ha entrado en el Parque Hernández mientras hablaba del modernismo. Además, ha puesto una serie de vídeos de lugares que ha visitado por la mañana, como las Cuevas del Conventico. Unos sitos ante los que se ha quedado fascinado por su “belleza”.
Venía de Ceuta y este lunes marcha de vuelta a la península. Su intención es terminar la vuelta ajedrecista a España en junio. Hasta el momento, la iniciativa le está creando “sentimientos encontrados”, ya que, si bien es cierto que se está “maravillando” de lo que tiene España en términos de gentes o de geografía, también siente ya “un poco de cansancio”. Eso sí, asegura que, cuando habla con la gente por la calle, todo el mundo se interesa por el ajedrez.
Por lo tanto, aunque le experiencia le está provocando “un batiburrillo de sentimientos”, siente, por encima de lo demás, que está haciendo “algo grande” por él mismo, por el mundo del ajedrez y por España.
Profesor y veterinario
De profesión veterinario en Zaragoza, dejó ya de ejercer por cuestiones personales y ahora se siente “muy contento” con sus clases de guitarra y de ajedrez, y particularmente con este proyecto. Ha publicado un libro y tiene el título de monitor superior por la Federación Española de Ajedrez y una página web, www.vueltajedrecista.com. Es, pues, una persona con “cierto renombre” en este mundo.
Durante 25 años, dirigió la Agrupación Artística Aragonesa, el club de ajedrez más antiguo de España de los que aún perviven, cuenta. Ahora ya simplemente es profesor allí y también dirige y da clase en una escuela de guitarra.
Es gracias a estas tres facetas –club de ajedrez, clases de ajedrez y clases de guitarra-, junto con sus ahorros, como está sufragando la iniciativa de la vuelta ajedrecista a España, porque, como bien lamenta, cuando al principio empezó a proponer la idea a diputaciones y ayuntamientos, nadie quiso ayudarlo.