El portavoz Daniel Conesa acoge con “cautela” y “sorpresa” la noticia dada por Dionisio Muñoz.
El anuncio por parte del secretario general socialista local, Dionisio Muñoz, sobre el próximo traslado de la sede institucional de la Delegación del Gobierno en Melilla al edificio del Banco de España, cerrado desde el pasado 31 de mayo, no dejó indiferente al Gobierno local. Su portavoz, Daniel Conesa, sin entrar en valoraciones más profundas cuestionó la necesidad de este cambio y manifestó su sorpresa ante el hecho de que fuera el líder socialista melillense el que diera esta noticia.
“Llama la atención que sea Muñoz quien haga este anuncio”, continuó Conesa, y añadió que desde el Ejecutivo melillense lo tomarán “con prudencia y cautela” a la espera de las explicaciones correspondientes por parte del delegado del Gobierno, Antonio María Claret, sobre este asunto, y más concretamente, “sobre la necesidad que hay realmente para hacer este cambio” sobre otras posibles necesidades “más importantes”.
“No entro a valorar la conveniencia” de esta decisión, afirmó el portavoz del Ejecutivo melillense y sí recordó que la preocupación de la Ciudad era que un edificio “singular y noble” quedara en desuso y abandonado con el deterioro que acarrea mantener cerrado un inmueble, caso del antiguo edificio de Correos o el ubicado en los terrenos de Isla de Talleres, “que no lo cedieron a la Ciudad Autónoma porque se iba a destinar a Capitanía Marítima y desde entonces no se ha sabido nada”, apuntó Conesa.
No obstante, afirmó que “más vale eso que nada” antes que abandonar a su suerte un edificio público “singular y noble”.