Antonio María Claret lo califica como “un hecho lamentable que atenta contra la libertad de los ciudadanos” y pide paciencia para encontrar a los culpables .
El incendio de la casa de Abderramán Benyahya en la madrugada del pasado lunes continúa siendo arduamente investigado por el Cuerpo Nacional de Policía (CNP), según afirmó ayer el delegado del Gobierno, Antonio María Claret, a preguntas de los periodistas. En este sentido, el máximo representante de la Administración del Estado en Melilla no dudó en calificar los hechos de “lamentables”, al tiempo que condenó lo ocurrido. “Se trata de una tropelía que atenta contra la libertad de los ciudadanos”, afirmó.
En cuanto al desarrollo de la investigación policial, pidió paciencia, ya que “hace falta tiempo para encontrar a los culpables”. En este sentido, rechazó confirmar si se ha producido algún avance en las pesquisas policiales, pues apuntó que en este tipo de cuestiones no se deben realizar declaraciones hasta que haya algún resultado en firme. “Las manifestaciones a destiempo son contraproducentes para la investigación”, recalcó.
Tampoco entró Claret en detalles sobre la posible relación entre el ataque a la casa de Benyahya y los disturbios ocurridos durante la noche de los comicios electorales y posteriores en la Cañada de Hidum. “No se deben dar pistas sobre casos como éste, ya que sólo beneficia a los delincuentes”, aseveró. No obstante, garantizó que la Policía Nacional se encuentra muy volcada con la investigación, la cual avanza a buen ritmo.
En cuanto a la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado durante los incidentes del 22 de mayo y los días siguientes, justificó su actitud señalando que la prioridad en aquel momento era devolver la situación a la normalidad para luego esclarecer quienes habían sido los culpables de provocar los disturbios.