Considera que podría aprovecharse la planta baja y ceder las otras pues el coste del nuevo local es de 1.500.000 euros al año.
La sección sindical de Correos de UGT lamentó no entender el cambio de ubicación del servicio postal a unos nuevos locales teniendo un edificio entero que podría haberse rehabilitado, en concreto la planta baja, que es la que suele utilizarse para este trabajo.
De este modo se expresó el responsable de UGT en el ámbito nacional para Correos, José Sayagües, al comentar que el nuevo local es insuficiente para realizar el servicio, en concreto en una ciudad como Melilla que tiene un tráfico anual de tres millones y medio de envíos, 500.000 de ellos en paquetería.
Junto a ello, recordó que el coste del alquiler del nuevo local era de 1.500.000 euros anuales, a lo que habría que adjuntar los 700.000 euros gastados en su acondicionaminento. Para Sayagües, con ese dinero podría haberse rehabilitado la planta baja del edificio de Correos, que es la más útil para este trabajo. Además, adjuntó que el resto del edificio podría haber sido utilizado por otra administración, local o estatal.
De hecho, señaló que el coste de la rehabilitación ascendería a unos cinco millones de euros. el responsable sidnical comentó que la planta baja tiene 2.000 metros cuadrados y hay espacio suficiente para acoger el servicio postal de Melilla.
Junto a ello, lamentó no entender la compra de de máquinas calsificatorias por valor de cuatro millones de euros, inversión que podría haberse utilizado en la rehabilitación el antiguo edificio.
Elecciones sindicales
En otro orden de cosas, criticó que el candidato de CCOO a las elecciones en el sector de Correos en Melilla hubiera formado parte de la mesa orgnizadora de los comicios.
Sayagües lamentó esta actitud, que no por ser legal tenía que ser moral. Así, mostró su estupefacción por esta situación que se había creado en Melilla y adjuntó que lo importante en cualquier caso es que haya procesos democráticos en la ciudad.
Por último, añadió que lo más lógico es que esta persona hubiera dimitido para poder presentarse a los comicios en el sector postal de la ciudad.
Sayagües afirmó que esta persona había tenido una postura “extraña” en el procedimiento de organización de las elecciones. En cualquier caso, señaló que las discrepancias las tiene UGT con la empresa, no con CCOO.