El Partido Popular ha exigido este martes que se lleve a cabo una limpieza de choque en Aulas Culturales de Mayores que, según denuncia la candidata Fadela Mohatar, no se limpia desde hace más de un año. Estas declaraciones se realizaron a las puertas del centro lo que llamó la atención de una decena de usuarias, que corroboraron ante la prensa las palabras de Mohatar. “Lo que no hemos cogido con el covid lo vamos a pillar ahora”, decía una de estas mujeres.
Mohatar pidió que las instalaciones “se cierren durante una semana o los días que sean necesarios” para que quede garantizada “la sanidad e higiene” y los mayores vuelvan al centro “con garantías de salubridad”. “Mira que ha habido pufos y desastres en el Gobierno pero no podíamos ni imaginar hasta qué límite se estaba poniendo en peligro la salud de las personas mayores en Aulas Culturales”, comentó.
Según la diputada local y candidata de los populares, Aulas Culturales siempre fue “un emblema del trabajo bien hecho” en los sucesivos gobiernos de Imbroda, gracias, fundamentalmente, al trabajo del profesorado “a los que se daba autonomía para mantener más de cuarenta disciplinas en las que los mayores tenían grandes cotas de desarrollo personal que ahora ha quedado en evidencia”.
Fadela Mohatar criticó el hecho de que el profesorado haya perdido independencia e incluso la posibilidad de elegir entre ellos a un director, como se hacía antes. Ahora, señaló, la dirección de aulas corresponde a la dirección general de la Viceconsejería del Mayor.
“Ya no se trabaja para los mayores, simplemente se gastan fortunas en hacer un concierto. Por ejemplo, se ha perdido un convenio histórico y muy ventajoso con la Fundación la Caixa a través del cual nuestros mayores recibían alfabetización digital, algo muy importante en nuestros días”, recalcó.
Pero lo que “resulta un clamor” entre los propios usuarios es, según Mohatar, la falta de limpieza. “Lleva sin limpiarse un año aunque son ochocientos los mayores que acuden al centro cada día”, comentó la representante popular para asegurar que el Gabinete de Seguridad e Higiene en enero pasado amenazó a la Viceconsejería con cerrar aulas si no se procedía de manera inmediata a su limpieza.
El problema es que la empresa encargada del servicio, concretamente Hércules, no paga a su plantilla desde hace más de un año. Se trata de ochenta trabajadoras que no perciben su salario. Aún así, muchas de ellas siguen yendo cada día a su puesto a pesar de que “no tienen ni productos de limpieza”, comentó Fadela Mohatar.
No es la primera vez que el PP denuncia la situación de la plantilla de Hércules. “Ya dijimos que la solución era tan sencilla como buscar la forma de rescindir el contrato por incumpliendo del pliego de condiciones y al ser la limpieza un servicio público, la Administración está obligada a volver a contratar a otra empresa, que asumiría a estas trabajadoras”.
Que las empleadas de Hércules no cobran su sueldo es de dominio público desde hace largo tiempo. “Lo saben los sindicatos, el Gabinete de Sanidad e Higiene, se ha denunciado a la Inspección de Trabajo… Pues está sucio el centro. Ese es el ejemplo más palpable de la gestión de este Gobierno que no sabe hacer ni siquiera lo más elemental, que es mantener la limpieza de unas instalaciones”.
“No hay productos de limpieza, los servicios se limpian con agua. Este es el Gobierno social, es un bluf de principio a fin que no sabe hacer ni las cosas más elementales como es mantener los servicios esenciales”, concluyó.
Y si no se han producido más protestas de los usuarios sobre este asunto de la limpieza y la falta de oferta cultural es porque los usuarios “tienen miedo” a que cierren aulas.
Más cultura
Al hilo de las declaraciones formuladas por Fadela Mohatar, una usuaria de Aulas Culturales, María Luisa López Noblejas, quiso dejar de manifiesto la “falta de protagonismo” de la cultura en este centro. “Es como si nos hubieran relegado a los viajes del Imserso y a las fiestas”, se lamentó.
“Los mayores somos algo más. Cuando nos jubilamos no se nos quitan las ganas de aprender, de saber y de estudiar otras cosas que no tuvimos oportunidad de hacer cuando estábamos trabajando por falta de tiempo”, razonó para añadir que la oferta cultural “se ha perdido mucho”.
“Antes nos daban opción a muchas actividades y ahora no nos dejan coger más que tres. Esto ha cambiado y el profesorado no está contento porque están restringidos a otro tipo de cosas”.
López Noblejas entiende “que hemos perdido calidad”. “Deseas jubilarte no solo para descansar son para hacer todas esas cosas que no has podido hacer antes y esa oportunidad única nos la están quitando. Llevo años viniendo y cada vez es peor”.