El cierre de la aduana comercial de Melilla con Marruecos ha hecho estragos en las cuentas del Puerto de la ciudad. Según el presidente de la Autoridad Portuaria, Víctor Gamero, la comparativa de los datos registrados en febrero de 2018 con los de febrero de este año arrojan una caída del 50% en el número de pasajeros y del 64%, en la carga.
Estos datos, en opinión de Gamero, demuestran la "relevancia económica que tiene para Melilla que la aduana permanezca cerrada", dijo desde Madrid, en declaraciones a El Faro.
El presidente del Puerto ha acudido a la capital española para asistir a una reunión que tiene mañana en Puertos del Estado y ha aprovechado para unirse a la protesta en la puerta del Congreso que Coalición por Melilla ha llevado a las Cortes, coincidiendo la votación de la moción de censura que Vox ha presentado a Pedro Sánchez.
Para Gamero, estas cifras que retratan el descenso del número de pasajeros y de carga en el Puerto no se están dando en ningún otro punto de España y, reflejan, por tanto, la magnitud de los perjuicios que el cierre de la aduana provoca a la ciudad.
Indicador de la economía local
"El Puerto es un indicador de la economía de Melilla", señala el presidente de la Autoridad Portuaria, a la par que recuerda que CpM, a través de Compromís, lleva desde 2020 presentando enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado en las que reivindica todos los puntos que la patronal CEME ha plasmado en un documento, que es el que finalmente se ha entregado en el Congreso.
Titulado "Unidos por el futuro", el documento de la CEME, que ha hecho suyo CpM, incluye propuestas para mejorar la situación económica de la ciudad, entre las que se cuentan la mejora del Tratado de Buena Vecindad con Marruecos, la reapertura de la aduana y la fluidez del paso por la frontera; la puesta en marcha de la bonificación al transporte de mercancías; el mantenimiento de la bonificación del 50% a las cuotas de la Seguridad Social; un registro de buques; un puente marítimo y aéreo con Málaga y billetes más baratos que conecten con la península, así como la declaración de Melilla como Zona Económica Especial.
Estas reivindicaciones de la CEME coinciden en gran medida con lo que CpM, a través de Compromís, ha reclamado en el Congreso también como enmiendas a los Presupuestos Generales de 2022 y 2023.
En esencia, añade Gamero, lo que se está pidiendo son soluciones económicas que compensen las pérdidas que tenemos en Melilla derivadas del cierre de la aduana comercial y por eso aboga por "abrir la frontera" ya que la infraestructura que preside (el Puerto) es una de las que más sufre con el cierre.
La protesta de CpM junto a la patronal CEME, la asociación Acsemel, Unitaxi y diversos agentes sociales de Melilla se produce un mes y medio después de que la Confederación de Empresarios de Melilla rompiera el diálogo con la Delegación del Gobierno al sentirse timada porque la aduana no abrió ni antes ni después de la Reunión de Alto Nivel (RAN) que España y Marruecos celebraron los días 1 y 2 de febrero como se había anunciado a los empresarios locales.
Hay que recordar que CpM denunció por la vía judicial, en una causa que sigue su curso, la orden del Ministerio de Sanidad que en la práctica impide importar por la frontera pescado marroquí para consumo propio.
El puerto de Melilla se tiene que reinventar, mas de 2000 m de atraque portuario tiene muchas posibildades al margen del tráfico de mercancias. En el resto de ESpaña la utilzación de muelles está buscadisma para todo tipo de activdades tales como formación marítima, investigaciones pesquera y de acuicultura y sobre todo reactivación de nuestra flota pesquera para bastecimento de Melilla sin depender de nadie.
Muy bien, ahí están dando el callo. No podemos seguir así y lo peor es hay gente absolutamente insolidaridad, cruel y toxica que defiende que la frontera esté cerrada. No lo puedo entender. Menos mal que la cordura y el bien siempre se imponen.