Hace semanas venía diciendo en uno de mis artículos de ‘Al Hudud: La Frontera’, que antes o después sabríamos si lo que nos venían contando los portavoces oficiales y oficiosos del Gobierno (como El País) eran mentiras o milongas. Uso la palabra ‘milonga’, según la acepción de la RAE, coloquialmente, engaño, cuento para que nadie se enfade y vaya por delante que, en esta columna, siempre hablo en primera persona y no en nombre de ninguna asociación o entidad a la que pertenezco o pueda representar. Ya sé que puedo parecer poco correcto políticamente, pero a mis años, me lo puedo permitir.
En septiembre de 2018, la delegada del Gobierno en Melilla nos anunció que la “dura” respuesta de nuestro Gobierno al bloqueo de las importaciones era la creación de una comisión “técnica” de las D. Grales. de Aduanas de ambos países. Una milonga pues ni había ni hay nada técnico que negociar y ahora han vuelto a las andadas tras la RAN anunciando la creación de una comisión que va a trabajar sobre una “hoja de ruta” -que habrá impuesto Marruecos- para decidir cómo se va a reabrir la aduana de Melilla y qué mercancías se permitirán. Es conocido el dicho de "si quieres retrasar, o distraer, la solución de un asunto crea una comisión".
El 7 de abril del 2022, el presidente de nuestro Gobierno -desde Rabat- nos ilusionó con el acuerdo alcanzado con Marruecos para el restablecimiento de la plena normalización de la circulación de personas y de mercancías. Le creímos. En septiembre del pasado año, el ministro Albares -desde Nueva York- anunciaba la reapertura de la aduana comercial para el mes de enero y el 7 de enero de este año, el mismo ministro aseguraba que la reapertura de la aduana de Melilla se produciría como estaba previsto antes de la cumbre con Marruecos, para la que en esa fecha faltaba una semana. Luego se retrasó hasta el 2 de febrero.
Para colmo, la justificación dada por el ministro Albares, tras la celebración de la RAN, de que la aduana de Melilla va a estar operativa, pero sin fecha determinada y de forma gradual y progresiva, porque no quiere que se produzcan avalanchas de gentes que vengan a comprar, más que una milonga es una falacia. Como debería saber el ministro, el tránsito de mercancías documentadas por la aduana nada tiene que ver con el paso de las personas por la frontera y, además, la actual suspensión de la excepción Schengen exigiendo el visado a todo extranjero no comunitario no da lugar a las posibles avalanchas para venir a comprar. Ahí están las cifras desde que se abrió la frontera en mayo pasado en comparación con las de antaño antes del cierre por la pandemia.
Nunca se dijo -ni a los empresarios ni a nadie- que se iba a hacer una “primera” expedición como “prueba piloto” para evaluarla en la RAN. Parece ser que las 36.000 expediciones de exportación y las 45.000 de importación efectuadas desde 2010 a julio del 2018 no les debían de parecer suficientes ‘pruebas’ ni a nuestros negociadores ni a los vecinos. Y el paripé del “hito histórico” -que no reapertura- del día 27 no fue más que eso, una milonga, pues la aduana sigue cerrada a cal y canto después de haberse celebrado la RAN. Todo lo relativo a la reapertura de la aduana ha sido una milonga, cuando no mentira.
Por otra parte, el no haber avanzado un solo paso en conseguir que Marruecos retire la no aplicación del régimen de viajeros a los que entran por Melilla y Ceuta hace que lo de la libre circulación de personas y mercancías anunciada en abril del año pasado y reiterada varias veces después, pase de ser milonga a ser una mentira. Marruecos desde hace nueve meses sigue sin permitirnos “pasar ni un danone”, ex delegada del Gobierno en Ceuta dixit.
En lo relativo al control informático de las personas que entran y salen por nuestra frontera (Sistema de Entradas y Salidas de la UE) que debería estar ya más que terminado según nos prometieron hace años, nos encontramos de nuevo con más retrasos, por lo menos hasta el último trimestre de 2023 según respuesta escrita del Gobierno en diciembre pasado. A la vista está que las colas de espera y la lentitud en los controles hace que la prometida y ansiada fluidez en el paso de la frontera siga siendo una milonga.
Las políticas locales que presumen de tener hilo directo con el presidente del Gobierno y sus ministros no han impedido que se dicte una norma que modifica a peor la bonificación del 50% en las cuotas de seguridad social que veníamos disfrutando las empresas de Melilla y Ceuta desde el 29 de marzo de 2004. Todavía no han dicho ni pío y luego, para justificarse, dirán que ha sido un error y que se va a rectificar como ocurrió con la de los autónomos. Espero que no sea otra milonga.
El mejor contrato marítimo de la historia es otra milonga, sin más comentarios. Y que están trabajando duramente para conseguir la rebaja de los altos precios de los billetes aéreos, aunque a los residentes se nos descuente el 75% del mismo, sigue siendo una milonga después de cuatro años y pico.
La bonificación al transporte de mercancías, aprobada en los PGE del 2017 con efecto desde 2016 otra milonga, pues sigue pendiente de aprobación el RD que permitiría rebajar el coste del transporte a Melilla. Y, encima, no han querido incluir en el borrador del RD lo correspondiente al transporte de los productos alimentarios de primera necesidad que solicitamos desde la CEME porque, según el D. Gral. de la Marina Mercante, la Unión Europea no lo permite. Espero la respuesta a pregunta hecha por nuestro diputado Sr. Otazu para que el Ministerio diga que norma impide esta bonificación para poder calificar como milonga o como mentira la justificación dada por nuestro Gobierno para no incluir esa posible bonificación en el RD y que hasta ahora no se ha puesto en marcha después de casi seis años esperándola.
Y si hablamos del Plan Integral de desarrollo socioeconómico de Melilla que nos han pintado en un papel con muchos gráficos y colorines, por ahora, nos es más que un conjunto de promesas pues de los 357 millones anunciados a bombo y platillo ya deberían estar presupuestados para el 2023 algo más de cien millones y solo aparecen 10 millones en los PGE. Y salvo que se pruebe lo contrario, por ahora, no puedo más que calificarlo como otra milonga. ¿Se ha constituido la Comisión Mixta anunciada en el Plan Integral? Y de ser así, ¿podemos conocer si se han reunido y los temas tratados? ¿También hay una hoja de ruta para los trabajos de esta Comisión o es otra milonga más?
Un empresario de Ceuta que ha estado recientemente en nuestra ciudad me comentaba que le ha dado la sensación de que en Melilla todos estamos enfadados con todos y que no entiende cómo no hay unidad entre todos los políticos y entre todos los empresarios para conseguir salir juntos de esta situación, Yo tampoco lo entiendo, pero es lo que tenemos. Y, por desgracia, esto no es una milonga ni una mentira. Es la triste realidad.