El presupuesto global de Melilla para el año 2023 asciende a un total de 355.518.797 euros, lo que implica una bajada del 2,67% con respecto a los de 2022, según los datos aportados por la consejera de Hacienda, Comercio y Empleo, la cepemista Dunia Almansouri, quien explicó que el descenso se debe a un menor capítulo de inversiones. Las previsiones de cara al próximo ejercicio señalan que se continuará “en la senda de la mejora y recuperación económica” de la ciudad para que “siga viva”. El objetivo, señaló, es mantener las políticas que se han ido desarrollando tanto en 2021 como en 2022 en cuanto a las ayudas a las empresas, los colectivos y las familias.
En cuanto a las distintas áreas de gestión, la Consejería que más aumenta su presupuesto en 2023 es la de Políticas Sociales, que alcanza un total de 27,6 millones de euros, lo cual implica 2,3 millones más que en 2022.
De mayor a menor partida presupuestaria, la relación queda de la siguiente manera: Presidencia y Administraciones Públicas 98,4 millones (lleva la nómina de personal); Medio Ambiente 65 millones; Hacienda, Comercio y Empleo, 40,8 millones; Infraestructura, Urbanismo y Deporte 36,7 millones; Políticas Sociales 27,6 millones; Educación, Cultura, Festejos e Igualdad 23,4 millones; Menor y Familia 21,8 millones; Asamblea, Presidencia y Seguridad Ciudadana 13,1 millones, y Distritos se queda en 3,7 millones.
En cuanto a las empresas públicas, Promesa es la que se lleva la mayor porción del pastel con 7,5 millones seguida de Inmusa con 4 millones y Emvismesa con 3,7 millones. El Patronato de Turismo gestionará 3,3 millones, el consorcio de la UNED 1,8 millones y la Fundación Melilla Monumental no alcanza el millón (990.000 euros).
La inversión por habitante será en 2023 de 537 euros, una cifra muy superior, según Almansouri, a la que puede observarse en cualquier otra ciudad. El gasto social por melillense será de 640 euros, de educación se sitúa en 322 euros, de cultura en 164 euros y de comercio en 129 euros.
Dunia Almansouri destacó que se trata de un presupuesto “vivo”, “muy bueno para Melilla y para el horizonte”, que “deja margen para el optimismo” y resulta “viable” frente a los discursos derrotistas.
Líneas de trabajo
La consejera de Hacienda responsable de las previsiones económicas de la ciudad autónoma manifestó que el Gobierno seguirá trabajando en las tres líneas que han caracterizado su gestión en los últimos años, caracterizados por la crisis que supuso la pandemia por el covid.
Y la primera de ellas está relacionado con la protección a la familia y la lucha contra la pobreza. En ese sentido, adelantó que se mantendrá la tarjeta para la adquisición de productos de primera necesidad, la educación infantil y las becas de Formación Profesional. Almansouri resaltó el “gran éxito” de la tarjeta, que permite “mantener la dignidad” de las personas vulnerables. Actualmente son 900 las tarjetas que se han concedido.
“Es una iniciativa que ha venido para quedarse y que le ha gustado mucho a los responsable del Fondo Social Europeo”, explicó. Su principal ventaja es que las personas vulnerables no se ven señaladas. Según Almansouri, se acabó “la foto en el comedor San Francisco” que ponía cara a esa población más desfavorecida.
La segunda línea va dirigida al mantenimiento de la inversión como instrumento de recuperación económica. En 2022 la partida presupuestaria fue de 44,4 millones, que baja en un 40% para 2023 “aunque sigue siendo importante”. De hecho, aseguró que durante esta legislatura se habrán empleado 200 millones de euros en inversiones, una cantidad que, según dijo, “refleja el esfuerzo del Gobierno de dotar a Melilla de una economía boyante” y cambiar su imagen. A modo de ejemplo citó lo “espectacular” del barrio de Hernán Cortés o la urbanización de la zona de Gabriel de Morales.
El tercer eje, por su parte, plantea “un nuevo horizonte”, que se inició en 2021 con el encargo de un plan estratégico “que ya es una realidad” y sobre el que se ha empezado a trabajar con la puesta en marcha del “plan de promoción económica” que se basa en “atraer empresas” a la ciudad.
Finalmente, la consejera de Hacienda anunció que en los próximos días cada consejero explicará públicamente cuáles son los principales objetivos y proyectos que desarrollarán sus respectivas áreas durante 2023.
Qué bien le vendría a Melilla que la Almansuri volviera a trabajar de comercial de Vodaphone y dejara de una vez de mamar de la teta de la política