La Ciudad Autónoma invertirá cerca de un millón de euros para que la entrada a Melilla desde Marruecos “presente un aspecto digno de un país de la Unión Europea”.
El Gobierno melillense continúa proyectando obras para mejorar el aspecto de la ciudad, ya que en la jornada de ayer el presidente del Gobierno autonómico, Juan José Imbroda, anunció la salida a contratación de las tareas de mejora y rehabilitación de la zona colindante al puesto fronterizo de Beni Enzar.
Según recordó la máxima autoridad local en declaraciones a Radio Nacional de España (RNE), el objetivo de la iniciativa es que la entrada en Melilla para aquellos que llegan de Marruecos “presente un aspecto digno, a la altura de un país de la Unión Europea”, pues señaló que la actual zona se encontraba muy deteriorada.
De igual modo, reseñó que el proyecto había sufrido ciertos retrasos en base a las negociaciones realizadas con los propietarios de varios inmuebles de la zona, lo que ha provocado una demora de varios meses en el comienzo de la obra, ya que cuando esta se presentó por primera vez de mano de la Consejería de Medio Ambiente, se estimó que las tareas se iniciarían en la recta final del 2010.
Según especificó el consejero del área, Ramón Gavilán, en aquella ocasión, la obra se dividirá en varias actuaciones complementarias, siendo la principal crear un paseo pavimentado donde predominen las especies vegetales en la carretera de acceso a la frontera, aunque prescindiendo de las zonas ajardinadas para evitar la acumulación de basuras y los gastos de mantenimiento. De igual modo, esta zona se vería complementada con la implantación de mobiliario urbano e iluminación, así como con la creación de unas 80 plazas de aparcamiento.
De manera paralela, se está proyectando la creación de zonas deportivas a la espalda de los edificios de la calle Príncipe Felipe, con el fin de que la barriada gane en instalaciones de esparcimiento y evitar que se instalen en el lugar puestos de venta ambulante.
Todo ello, según precisó Imbroda, supondrá un desembolso de 1,5 millones de euros de las arcas de la Ciudad Autónoma, siendo el tiempo de ejecución de la obra de unos 8 meses, aproximadamente.
Apertura del Kursaal
A preguntas de los periodistas de RNE, el máximo dirigente del Gobierno local señaló que el Teatro Kursaal abrirá sus puertas a partir del 19 de marzo, pues a partir del 28 de ese mes la Ley prohíbe la inauguración de nuevas obras ante la proximidad del periodo electoral.
Así pues, Imbroda aseguró que tal día se finalizará una de las obras más emblemáticas de la presente legislatura, gracias a la cual Melilla ganará un teatro que también hará las funciones de cine -para proyecciones públicas, no a nivel comercial- y de palacio de exposiciones. Su aforo, según destacó el presidente, será de 800 personas, al tiempo que destacó la comodidad de las butacas que se han instalado en el inmueble.
Para finalizar, reseñó que en su inauguración estarán presentes personajes del ámbito cultural melillense. “Podríamos haber traído a algún artista de la península, pero hemos considerado más oportuno que sean los de la ciudad los que abran sus instalaciones por primera vez”, concluyó el presidente.