La Legión ha celebrado esta mañana en CII aniversario de su fundación. El acto ha tenido lugar en el acuartelamiento Millán Astray, donde se ha hecho entrega de diversos premios y distinciones.
La parada militar comenzó, como no podía ser de otra manera, con la entronización de su protector, el Cristo de la Buena Muerte.
En este acto se entregaron los premios Legión a cuatro damas y caballeros legionarios, y las distinciones de las seis Cofradías que mantienen una vinculación con La Legión.
Uno de los momentos más emotivos que se vivieron fue la despedida del personal que este año pasa a la reserva. Con mucha emoción contenida, se despidieron de la Enseña Nacional.
El coronel Antonio Julián Ferrera, jefe del Tercio ‘Gran Capital I de La Legión’, quiso recordarles que se llevan “lo máximo a lo que puede aspirar todo militar cuando deja su unidad, el cariño y la admiración de vuestros compañeros”.
“Ahora toca seguir sirviendo a España, pero de forma más relajada, desde otro puesto y desde otra perspectiva”, añadió.
En la alocución del coronel se recordaron las palabras con las que Millán Astray recibía a los primeros legionarios en el Patio del Cuartel del Rey en Ceuta, hace ahora 102 años. "El que esté arrepentido, el que no se sienta suficientemente capaz de llevar esta vida sublime, no tiene más que presentarse al médico y decirle que le duele la garganta. Como no merece ser legionario, será pasaportado a la península".
No quiso terminar su discurso, sin recordar a los legionarios que participan actualmente en la misión de la OTAN en Iraq, así como, a los desplegados en las islas y peñones de soberanía española.
Tras el discurso del coronel jefe se procedió a rendir honores a los que dieron su vida por España.
El acto ha estado presidido por el general de división Luis Sáez Rocandio, Comandante general de Melilla. También han acudido el presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, y la delegada del Gobierno, Sabrina Moh.
El aniversario de La Legión ha finalizado con un desfile a pie, en el que no pudo faltar la famosa cabra de la unidad.