A lo largo de 2021, Mercadona, compañía de supermercados físicos y de venta online, logró reducir en Melilla su huella de carbono en 138 toneladas de emisiones de dióxido de carbono (CO2) respecto al 2020.
En concreto, ha incorporado en sus procesos importantes mejoras que le han permitido minimizar tanto las emisiones directas de gases de efecto invernadero en su supermercado en la ciudad autónoma y en su red logística, como las emisiones indirectas, derivadas de la compra y consumo de energía eléctrica de su red de tiendas, red logística y oficinas.
Así, a través de un modelo de negocio cada vez más eficiente y sostenible, la entidad reforzó el pasado año su compromiso con el medio ambiente, al rebajar el impacto ambiental de una huella que que ya ha sido calculada y está pendiente de certificación definitiva por el organismo oficial de acreditación AENOR, sigue el estándar ISO 14064. De hecho, estos criterios y estándares son idénticos a la certificación que la compañía ya obtuvo en el ejercicio anterior, en 2020.
En este sentido, la compañía sigue avanzando en la reforma de sus centros para adaptarlos a un tipo de tienda que permite un ahorro energético de hasta un 40 %, en comparación con una convencional. El centro de Mercadona en Melilla se corresponde con este modelo de tienda eficiente que dispone, por ejemplo, de mejoras de aislamiento, iluminación LED y gestión inteligente del consumo energético. También cuenta con unos sistemas de refrigeración más sostenibles, que reducen el uso de gases fluorados y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, en el marco del compromiso que mantiene con la sociedad melillense, en 2021 Mercadona donó 17 toneladas de alimentos y productos de primera necesidad a comedores sociales y entidades benéficas de la ciudad autónoma.
Transporte sostenible y eficiencia energética
Dentro de la apuesta por el transporte sostenible, Mercadona ha introducido numerosas mejoras en su flota, como la eliminación de elementos que no aportan valor, con el fin de aligerar el peso total del vehículo y conseguir cargar una tonelada más por camión que la media del sector.
Asimismo, la compañía potencia el uso de vehículos de mayor capacidad como los megatráilers para reducir el número de viajes, así como la logística inversa para evitar viajes en vacío, lo que le ha permitido alcanzar en 2021 una tasa de llenado del 82 %.
Mercadona también aboga por vehículos que cumplen los estándares más exigentes en materia de emisiones y el 99% de su flota se ajusta a las normas de motor Euro VI C, Euro VI D y Euro VI E.
El año pasado la entidad consiguió colaborar activamente en la iniciativa Lean & Green de AECOC, cuyo propósito es alcanzar los objetivos definidos en la Cumbre del Clima de París. Su implicación en este programa le permitió acreditar en 2021 una reducción del 27% en sus emisiones de CO2 derivadas de sus procesos logísticos, hito que le ha hecho acreedora de su primera estrella Lean & Green.
Adicionalmente, Mercadona tiene operativa en más de 800 supermercados la descarga nocturna silenciosa, que permite reducir el tráfico al utilizar camiones de mayor tonelaje en horas valle, evitar atascos, y agilizar los procesos de descarga. De esta manera, reduce la contaminación tanto acústica como atmosférica.
Además, en su apuesta por la optimización del consumo energético, Mercadona no solo ha seguido implantando su modelo de tienda más eficiente, sino que ha continuado reforzando su apuesta por las energías renovables, con la incorporación de 11.500 placas solares en tiendas, bloques logísticos y colmenas destinadas a la venta online, lo que supone un ahorro de 1.446 toneladas de CO2 al año.