La Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) denunció redadas y arrestos masivos llevadas a cabo últimamente por las autoridades marroquíes contra inmigrantes subsaharianos irregulares para alejarlos de los lugares fronterizos cercanos a España.
"Desde que han mejorado las relaciones entre Marruecos y España el aparato represivo contra los migrantes subsaharianos se generalizó en diferentes ciudades con arrestos masivos y traslados con diferentes itinerarios", alertó en Facebook la sección de Nador (noreste) de la AMDH, especialista en la defensa de los derechos de migrantes.
La ONG detalla que los migrantes que fueron arrestados en Nador (cercana a la ciudad española de Melilla) fueron conducidos hacia Beni Melal (en el centro del país); mientras que los arrestados en Tánger (norte) fueron trasladados "hacia la frontera con Argelia".
Los arrestados en Rabat se les alejó hacia Marrakech (sur), mientras que los emigrantes que fueron detenidos en El Aaiún y Tarfaya (frente a las costas de Canarias) fueron conducidos hacia Casablanca y Marrakech.
La AMDH añadió que se trata de "desplazamientos forzados para hacer la vida difícil a estos migrantes".
Ninguna fuente oficial marroquí se ha pronunciado al respecto.
El pasado ocho de marzo, unas 400 personas lograron llegar hasta el vallado en la zona establecida entre Barrio Chino y Beni Enzar, donde la perfecta coordinación e impecable actuación de las Fuerzas de Seguridad marroquíes contuvieron el salto al vallado de Melilla. Inicialmente el grupo lo formaban alrededor de un millar de personas, pero a medida que se aproximó al perímetro fronterizo se fue dividiendo en grupos.
Un amplio dispositivo policial establecido por la Guardia Civil en colaboración con la Policía Nacional permaneció a pie de valla por todas las zonas de actuación del perímetro, consiguiendo con esa coordinación la neutralización del salto en su totalidad. La Policía Local se sumó una vez más al dispositivo, cortando las carreteras para garantizar la seguridad del dispositivo y de los ciudadanos.