La Junta Directiva de la asociación Acsemel se reunió este martes con el presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, para abordar las preocupaciones del sector y tratar de buscar propuestas de mejora en común.
Según un comunicado que ha remitido Acsemel, la conversación giró sobre todo en torno a la dramática situación que padecen los comerciantes que tienen sus negocios enfocados al comercio transfronterizo con Marruecos, cuya situación se tornado más crítica desde el cierre fronterizo.
Desde Acsemel señalaron que, tras finalizar la primera valoración, la buena predisposición del presidente de Melilla para poner en marcha todas las soluciones propuestas con el fin de reactivar a este sector tan castigado. Pero también entienden que existen muchos temas que desde la Ciudad Autónoma de Melilla no se pueden solucionar, como las cuestiones relacionadas con la diplomacia marroquí. Por ello, transmitieron también la importancia de presionar todo lo posible a las autoridades del Gobierno central para poder dar una solución a las miles de familias que dependían del comercio transfronterizo.
“Entendemos que éste es un momento crucial y delicado, teniendo en cuenta los graves acontecimientos ocurridos en los anteriores días en nuestras fronteras terrestres, donde se ha reflejado que ésta situación es tan dramática para ambos lados de la frontera puesto que afecta a miles de familias que dependían de la relación con el país vecino”, indicaron.
De esta manera, solicitan a las autoridades locales que hagan esfuerzos en transmitir la difícil situación que se vive a ambos lados de la frontera, y exigiendo al Gobierno central y al de la Unión Europea que se involucren en la búsqueda de una solución. Entienden que si los esfuerzos son solo por parte del Gobierno local de Melilla, no se llegará a una solución firme. Así que en la reunión con Eduardo de Castro, la Junta Directiva de Acsemel han tratado diversos puntos.
El primero es que se pretende anular el impuesto del IBI así como otros impuestos municipales generados desde el cierre fronterizo a todas las naves que se encuentren cerradas o que hayan sufrido pérdidas en su factura por el bloqueo de la crisis sanitaria. Para eso debería justificarse la disminución del 35% en la facturación del primer semestre de 2021 para compararlo con la facturación de antes del cierre de marzo de 2020.
En segundo lugar, se propone que las naves que se dediquen al comercio con Marruecos puedan ser reconvertidas para la fabricación y transformación de productos con las reglas ‘Origen en Melilla’. En este caso se aplicaría el régimen de ventajas fiscales y de transporte a la península para atraer a empresas. También reclamaron el retraso de las ayudas a empresas en el contexto de la COVID-19 y pidieron su agilización.
Y en cuarto lugar pidieron ayuda para encontrar alternativas laborales desde la administración a todos los empresarios que se dedicaban al comercio con Marruecos y que en estos momentos se encuentran con las empresas cerradas y sin perspectivas de futuro
"Después de los últimos acontecimientos producidos por parte de la entrada ilegal en Ceuta y Melilla, tenemos que intentar aprovecharnos de esta situación, ya que ahora contamos con los focos de toda Europa y España en nuestra ciudad, tenemos que demandar y exigir todo lo que necesitamos para poder asegurar la españolidad de Melilla y no solo con palabras", conclute el comunicado de Acsemel.
ESTOS SRES QUIEREN SOCIALIZAR LAS PERDIDAS QUE SE DERIVAN DE SUS NEGOCIOS Y PRIVATIZAR LOS BENEFICIOS PARA SUS BOLSILLOS COMO HACE BASTANTES AÑOS ATRAS... EL COLMO DE LA DESVERGUENZA....