Al tiempo que señala al presidente Imbroda como “el único responsable político”. Para el coordinador de Unión, Progreso y Democracia en Melilla, tras la comparecencia del consejero de Deportes en la Comisión de Cultura, donde explicó su parecer sobre las múltiples denuncias que recaen en la Federación Melillense de Fútbol, “el Gobierno de Imbroda, está haciendo una escandalosa dejación de funciones y no tiene ningún interés en aclarar unos hechos con tintes vergonzosos y lamentables”.
“A Imbroda –señaló Emilio Guerra, el asunto se le ha ido de las manos y ahora tiene una patata caliente”, ya que para el dirigente upedista, “el alcalde es el único responsable político de unos acontecimientos que ha tolerado, consentido y auspiciado, comenzando por el mantenimiento en su cargo del Sr. Robles, un gestor absolutamente incompetente y nefasto”.
Los diputados de la oposición en la Asamblea, deben, a juicio de Guerra, reunirse con las personas que han efectuado las denuncias y presentado las pruebas documentales, “para evaluar de primera mano el alcance y veracidad de las mismas, ya que por parte del ejecutivo local, el colaboracionismo y el intento de tapar -más que aclarar- es evidente, a tenor del tiempo transcurrido sin ningún tipo de acción investigadora”. Además, considera que la Federación, como receptora de importantes cantidades de dinero público, está obligada a rendir cuentas de los gastos efectuados, y la CAM a fiscalizarlos convenientemente. Sin embargo, subrayó, “parece ser que algo ha fallado en esa relación regulada por ley y, por tanto, deben depurarse las responsabilidades a que hubiere lugar, suspender el convenio de inmediato o proceder a la restitución de los anteriores”.
Guerra recordó por demás que, en días pasados, el director-gerente de TV Melilla, aportó datos que indicaban la existencia de fondos de inversión en la Federación, facturas elevadísimas de teléfonos y restaurantes, así como los gastos de la tarjeta de crédito del presidente federativo.
Por todo ello, insistió en que “es insensato y demencial que el Sr. Robles se reafirme en que el convenio con la Federación está debidamente controlado”, ya que “por muy soberano en sus gastos que sea ese opulento y derrochador organismo, no podemos permitir que esté bajo sospecha la utilización irregular de más de 340.000 euros anuales que salen de las arcas públicas”.