Pone además como ejemplo de decisiones que alteran la normalidad pública, el cambio “unilateral” de reglamento en la Comisión de Patrimonio de la Ciudad Autónoma. El coordinador de Unión, Progreso y Democracia, Emilio Guerra, en respuesta a las declaraciones efectuadas por el consejero de Presidencia, Abdelmalik El Barkani -que imputaba a la administración Central la responsabilidad sobre el estado de crispación existente- manifestó ayer, en rueda de prensa, “que los melillenses son muy conscientes de que el sangrante y pernicioso duelo que tanto nos perjudica a todos, es debido a la ineptitud e incompetencia de nuestros políticos, ya sean del PP, PSOE o CpM”.
No obstante, en opinión de Guerra, para hablar de “crispación y enfrentamientos, tenemos otro ejemplo de actualidad, como es la nueva composición de la Comisión de Patrimonio, donde el Sr. Imbroda expulsa al Colegio de Arquitectos y al representante de la administración Central del Estado y se queda tan pancho”.
Para Emilio Guerra, la motivación del ejecutivo del Sr. Imbroda al proceder “de forma tan errónea y arbitraría” es, “primero, por venganza, porque el Colegio de Arquitectos tiene presentadas contra la CAM, nada menos que 20 denuncias de supuestas irregularidades urbanísticas”.
“Segundo –prosiguió- porque, al parecer, se pretende aumentar el volumen y la edificabilidad del Kursaal y ello va contra del Plan Especial del Centro Histórico, y evidentemente el Colegio de Arquitectos se opondría”.
Asimismo, prosiguió, “porque las obras del Kursaal comenzaron por 3,6 millones, ya van por 16 y puede que concluyan con 20 millones. Es la misma ‘cantinela’ de la Estación Marítima del Sr. Esteban ¿lo recuerdan?”, ironizó el upedista.
Y, además, porque, según Guerra, el sustituto del anterior representante del Estado en la Comisión de Patrimonio de la Ciudad Autónoma, cargo que hasta ahora ostentaba el recientemente cesado director provincial de Educación, Miguel Heredia, “les va a poner muy nerviosos e inquietos”.
“No es de extrañar, por tanto –concluía Guerra- que los melillenses preguntados en la encuesta del CIS, consideren en un 51% que la corrupción política está muy extendida en la ciudad. Eso sí que es grave y nos afecta a todos, pero principalmente a quienes tienen la responsabilidad de gobernarnos”, sentenció.