La Consejería de Seguridad Ciudadana informa de que la vigilancia policial se ha intensificado con motivo de la época estival.
La Policía Local de Melilla decomisó en el mes de junio 7.850 kilos de alimentos que se estaban vendiendo al público en puestos ambulantes que carecían de los permisos necesarios. La Consejería de Seguridad Ciudadana informó que durante el mes pasado se desarrollaron en la ciudad un total de 314 intervenciones de retirada de alimentos en la vía pública.
Entre los productos que habían sido puestos a la venta destacan frutas, frutos secos, bivalvos, pescado, verduras, hortalizas, así como productos de repostería. La Consejería destaca el perjuicio que este tipo de mercancía puede provocar en el consumidor, ya que carece de todo tipo de control, además de que la venta de estos productos ocasionan un perjuicio económico para aquellos comerciantes y establecimientos que sí cumplen con las normativas y tienen todos los permisos requeridos. La vigilancia policial contra este tipo de venta ilegal ambulante se ha intensificado con motivo de la época estival.