El presidente Imbroda y el consejero Ramón Gavilán informaron que la Confederación Hidrográfica ha dado el visto bueno al proyecto cuya redacción estará terminada el próximo octubre.
Uno de los proyectos más ambiciosos de la Ciudad Autónoma muy probablemente verá la luz a principios de 2012 como es el soterramiento de la desembocadura del río de Oro. Tras encargar el estudio hidráulico de la zona el Gobierno local ha esperado hasta el pasado lunes la autorización de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) competente en materia del cauce del río. Así lo anunciaron ayer el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, y el consejero de Medio Ambiente, Ramón Gavilán, quienes estiman que para el mes de noviembre el proyecto esté redactado y pueda salir a licitación.
Así, Imbroda prevé que la adjudicación definitiva se realice en abril de 2011 y contará con una inversión de cinco millones de euros y un plazo de ejecución de doce meses. En este sentido, lamentó que el proyecto no pueda ver la luz antes de finalizar la legislatura a causa de la demora en la autorización de la CHG.
Cinco millones de euros
Ambos responsables gubernamentales coincidieron en destacar que los beneficios que aportará esta actuación no sólo están encaminados al embellecimiento de la zona o al aumento de la capacidad de desagüe en caso de riadas, sino que también es una gran obra que creará numerosos puestos de trabajo y combatir así, al menos, los altos índices de desempleo en la ciudad.
Embellecimiento de la zona
Precisamente, uno de los principales beneficios que este proyecto tendrá para los vecinos de la zona es que se eliminarán los desagradables charcos de agua contaminada que se acumulan habitualmente en el cauce del río, pues “todo el agua del río será recogida por un gran colector subterráneo que desviará todo a la planta depuradora”, según explicó Gavilán.
Además, en el caso de que vuelvan a producirse lluvias torrenciales, no habrá peligro de desbordamiento en la zona pues esta obra “duplicará la capacidad hidráulica en un 250 por ciento” correspondiente a la previsión de precipitaciones medias en la ciudad durante 200 años.
Por su parte, el mandatario melillense destacó el cambio sustancial que provocará en la zona esta obra así como su embellecimiento y puesta al disfrute de los melillenses.
“Será una prolongación de la explanada multifuncional de San Lorenzo, unirá las dos orillas, respetando los Jardines del Agua”, explicó Imbroda. Una solución que ya se ha dado en otras localidades españolas como Valencia o Almería, apuntó. Así, calificó este proyecto como “la solución perfecta” para evitar más estancamiento de aguas y acumulación de residuos así como una capacidad mayor para desaguar y canalizar las aguas pluviales. Por último, será en noviembre cuando el Gobierno local celebre la presentación del proyecto con todo los detalles.
Y el cauce del río sigue contaminado
El consejero de Medio Ambiente, Ramón Gavilán, se refirió también a las supuestas inversiones y actuaciones que el Gobierno central y la Confederación Hidrográfica habían acometido en el cauce del río de Oro con el objetivo de paliar y reparar las consecuencias de los temporales y riadas producidas en los inviernos de 2007 y 2008. Según los datos ofrecidos por el consejero, “se han invertido siete millones de euros y ni yo ni los técnicos de la Consejería sabemos dónde se han gastado”, pues supuestamente se trataba de una inversión para acometer obras de emergencia ante los destrozos que provocaron las lluvias torrenciales hace dos años. Así, apuntó a que en 2007 se destinó un millón de euros en este concepto y en las dos anualidades posteriores tres millones cada año para reparar los daños causados por los temporales sufridos en la ciudad, y más concretamente, en el cauce del río pues de los residuos acumulados en la playa se encargó la Ciudad Autónoma. Por ello, preguntó al delegado del Gobierno que le informara cuáles han sido esas mejoras en el cauce puesto que “es competencia y responsabilidad de la Confederación y la Delegación”.