Despliegue del ejército en la valla de Melilla ayer martes después de que el lunes sufriera uno de los intentos de entrada más numerosos de los últimos meses, en el que participaron unos 260 inmigrantes subsaharianos, de los cuales alrededor de 55 consiguieran su objetivo. Dos de ellos fueron detenidos.
Los efectivos del Ejército fueron destinados la semana pasada para que colaboraran con la Guardia Civil en la vigilancia del perímetro fronterizo por el estado de alarma.
En el resto del país, los militares realizan diversas tareas.