Si hay algo por lo que destaca el grupo III es por el hecho de que cualquier equipo puede dar un susto a los supuestos gallitos. Esto provoca que nadie se relaje y premia a esos conjuntos con plantillas estables a lo largo de la campaña, aquéllos que no se ven mermados por lesiones deportivas y/o por las obligaciones laborales de las deportistas, especialmente cuando compiten como visitantes. La web especializada en el mundo del fútbol sala, comandada por Fran Gago, desgranó todo lo que aconteció en la última de las jornadas de competición oficial y donde el conjunto de nuestra ciudad, el Torreblanca Melilla está teniendo unos números para enmarcar.
Por otro lado, hay una serie de combinados jóvenes, cargados de talento que, si bien son algo irregulares por su inexperiencia, cuando tienen el día destrozan al que se ponga por delante. Cajasur Córdoba puede dar buena fe de ello, ya que, en su propio feudo, fueron superados por un Roldán B que pese a no llevar una senda uniforme en el campeonato, fue capaz de endosarle tres goles a uno de los favoritos al playoff. Algo parecido sucedió en el Ejido, donde las almerienses superaron por la mínima al también joven Torcal. En este grupo de inexpertas rebosantes de calidad y/o rigor táctico y espíritu de sacrificio, también podríamos incluir a Camoens, que si bien no consiguió puntuar en su duelo frente a la Cruz, puso contra las cuerdas las pacenses, como ya hiciera hace unas semanas con Guadalcacín. Precisamente, las jerezanas, se impusieron con cierta claridad a un Desguaces Paris que, con su juego alegre y atrevido, se ha marcado como meta acabar la temporada entre los ocho primeros. Alcantarilla no dio pie a sorpresas, superó sin piedad a un Cádiz que sigue teniendo la permanencia a tres puntos y que debe concentrar sus fuerzas en los combinados con los que se va a jugar los cuartos. Ésta ha sido la fórmula que ha elegido Hispania para continuar un año más en categoría nacional; las pimentoneras, con dos victorias seguidas frente a gaditanas y lojeñas, han conseguido salir de la zona de descenso, en detrimento de unas granadinas que deben reaccionar ya.
Equipo melillense
Torreblanca, por su parte, no dio ninguna oportunidad a un SC Garrovilla que, aparentemente, parece el equipo con menos talento individual del grupo. No obstante, las extremeñas son un ejemplo de trabajo, trabajo y más trabajo, por lo que, el que viaje a su pabellón pretendiendo traerse los tres puntos “sin bajarse del autobús”, se puede llevar una desagradable, y merecida, sorpresa. Por último, y no por ello menos importante, en el enfrentamiento entre Monachil y Martos, las granadinas obtuvieron la totalidad del botín ante unas jiennenses que tienen una asignatura pendiente en sus contiendas lejos de sus dominios. No obstante, gran temporada de un recién ascendido que tiene prácticamente asegurada la permanencia.