La ruta catorce del grupo de senderismo Ibriden N’na Rif llevará a aquellos que se animen este próximo sábado por un viaje al pasado a través de los últimos vestigios del protectorado español en Marruecos con la ruta por las Minas del Rif. Así es cómo se llama esta excursión que llevará a aquellos que se animen por los antiguos yacimientos de hierro de Uixan y Sotolasa, y de plomo, en Afra, las cuales estuvieron bajo control español desde principios de siglo XX , y con cuyos recursos minerales, sobre todo hierro, se abasteció a Alemania durante las dos Guerras Mundiales.
El punto de encuentro de la ruta de este sábado 25 de enero será a las 8:00 horas en la cafetería de La Campana, en el barrio del Real. Desde ahí el grupo cruzará a pie el paso fronterizo de Beni Enzar y ahí ya tomarán un autobús o un taxi hasta la ciudad de Nador. Desde allí llegarán hasta el pueblo de Seganga también en transporte público. Será en esta localidad donde los senderistas iniciarán la ruta. En este camino pasarán por lo que fue el antiguo acuartelamiento de los Regulares Nº5. Este antiguo cuartel conserva todavía algunos mosaicos muy bonitos, señala Ahmed Raha, presidente de la Federación de Montaña y Escalada de Melilla (FMEM).
Entonces, desde el antiguo cuartel de los Regulares, el grupo iniciará la subida hacia las famosas minas del Rif. La primera que verán será la de Uixan, un yacimiento de hierro con mucha historia ya que fue escenario de dos enfrentamientos bélicos en los que se vio envuelta España a los habitantes del Rif. Raha recuerda que en estos yacimientos se encontraba la célebre Compañía Española del Rif en la que figuraban nombres de empresarios, políticos, aristócratas ilustres como el conde de Romanones o el propio Rey Alfonso XIII. La explotación de recursos naturales en el norte de África, sobre todo el hierro supuso un gran negocio para España desde principios de siglo.
Así surgió la “mal llamada guerra de Marruecos”, señaló Raha, ya que no fue un conflicto con el Reino de Marruecos, sino con las personas que eran oriundas del Rif y que veían cómo se explotaba su tierra sin obtener beneficio alguno. Cuenta el montañista que antes de la famosa batalla de Abdelkrim, hubo otra que lideró un carismático líder rifeño llamado Bohmara, en castellano ‘El de los burros’, que decidió sublevarse porque al parecer no le pagaron lo que habían acordado.
Raha cuenta que los lugareños son muy amables y siempre están esperando a recibir a visitantes con el fin de comentar y recordar aquellos tiempos en los que trabajaban en las minas con mucho cariño, sobre todo en sus últimos años de explotación.
De ahí, pasarán a ver las ruinas que quedan de las minas y unas galerías a las que llaman coloquialmente ‘la catedral’. Por allí también verán una explotación a cielo abierto que tiene forma de lago. Allí cuando llueve, el agua depositada toma un color amarillento y rojizo, debido al proceso de oxidación del hierro.
Tras Uixan, pasarán por los yacimientos de Sotolaza, que también son de hierro, y después por la mina de plomo de Afra. Este es un yacimiento que está prácticamente dentro de un bonito bosque de pinares. Aunque Raha señala que todas las explotaciones mineras por las que pasará el grupo están rodeadas de bosques de pinos.
Una vez finalizada la ruta por las minas de Rif, el camino de vuelta es hasta Nador, donde volverán a tomar otro autobús de regreso a Melilla después de tomar un té.
Serán cerca de 25 kilómetros, y a lo largo de toda la ruta los excursionistas que se animen podrán disfrutar del entorno aunque también hay que superar varias pendientes un poco exigentes. Para ello se requieren llevar como calzado unas zapatillas técnicas de trekking.
No hay que olvidarse de llevar dinero para poder pagar el taxi o el autobús: 2 euros o 20 dirhams pueden bastar. Desde el grupo señalan que hay que llevarse agua y algún tentempié en la mochila, este pueden ser barritas de cereales, piezas de fruta, bocadillos o frutos secos. Además, es muy importante llevar documentación, el DNI de Melilla o en su defecto el pasaporte, para poder cruzar por la frontera (para los que lleven el pasaporte, no se olviden de volver a sellar a la salida).
Para más información de cualquiera de las salidas, los interesados pueden entrar en contacto el grupo de senderismo Ibriden N’na Rif en cualquiera de sus perfiles de redes sociales (Facebook e Instagram) donde pueden participar y animarse en cualquiera de sus actividades.
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Que recuerdos de las minas, vivi de pequeño la estacias en esas minas, con mis padres y hermano, pues mi padre era maquinista de la CIA. Setolaza., y en el depósito de Beni-Enzar.
Gracias por esos recorridos que hacéis y que a muchos mayores nos hubiera a gustado acompañaros si nos permitiera nuestras circunstancias.
Ánimo y seguir fomentando esa salidas, pues el territorio circundante es precioso y lleno de historias.
Mi corazón y espíritu está con vosotros.
Saludos de un montañero, fondista y paisano.
Sábado 25