“Hemos podido recoger testimonios de personas a las que se les ha devuelto en caliente”, declaró Buades, incluso a personas que estaban heridas.
“A mí, lo que más me revuelve es el comunicado de la Delegación del Gobierno”, declaró Buades sobre la última devolución sumaria a Marruecos de los 42 inmigrantes en Chafarinas el pasado tres de enero, “porque habla por una parte de rescate en el mar y por otro de control de frontera y nosotros lo que creemos es que se ha producido una devolución sumaria, en vez de por tierra, por mar”. Buades relata que en estos casos, se conducía a Melilla a las personas, que habían llegado al archipiélago, para su identificación; e incluso a las mujeres se les activaba el protocolo de trata o se podía acoger a asilo quien lo solicitase y al que no se le devolvía a las Chafarinas y de ahí los recogía una embarcación marroquí. “Hay cosas que no acabábamos de ver, pero pensábamos que al menos se les había identificado y había podido pedir asilo, que había unas condiciones mínimas; pero cuando son personas que sin pasar por Melilla, sin identificación y se les envía a los marroquíes bajo capa de rescate, mira, no”, manifestó Buades, pues ellos piden “un mínimo”, que es que “la persona sea primero”, pues estas “han entrado por un lugar por el que no se puede pasar, que no es por capricho, muchas veces es para salvar su vida” y segundo, según Buades, la persona tiene que “ser identificada y contar con asistencia letrada y con un intérprete y si vienen de una zona de no devolución, pues no devolverla”. Por ello, Buades contó que hay que “respetar” una reglas en estos casos y que en la devolución de las Chafarinas no se ha seguido ninguna.
2020
Al 2020, Buades le pide “un respeto de las reglas del juego, que en una democracia es importantísimo”, lo que significa que las personas que se encargan del control de fronteras, lo sigan haciendo con la “calidad profesional y humana” de hasta ahora, pero que “no se devuelvan a las personas directamente sin haber sido identificadas, sin asistencia de abogado, ni de intérprete” y que la gente “no tenga que morir para pedir asilo”, declaró Buades.