El Colegio Enrique Soler desarrolla a lo largo de esta semana del 23 al 27 de septiembre las actividades de la Semana del Clima. Con el fin de construir un mundo mejor con sus propias manos desde el centro educativo invitan a “dejar el mundo mejor de como lo hemos encontrado” y “a conservar la biodiversidad”, demostrando así el compromiso de sus alumnos y su profesorado con la sociedad.
El primer día realizarán un minuto de silencio por la tierra, con el que mostrarán la tristeza que sienten ante la crisis climática; el martes es el ‘Día de la Camiseta Verde’, todos deben ir vestidos de este color; el miércoles se realizará un ‘video-forum’ donde analizarán una película y su vinculación con la problemática ambiental. El jueves realizarán una serie de murales por la Semana del Clima, que expondrán y analizarán el viernes siguiente. Asimismo, el viernes, se realizará una pedalada y un parón en el centro para hacer del Enrique Soler un colegio “libre de emisiones”.
Mientras el planeta en su conjunto incrementó entre 2017 y 2018 un 2,7% la producción de gases que producen la crisis climática, en el caso de España, si bien en 2018 disminuyó sus emisiones un 2,2% respecto a 2017, según el Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, esto se debió principalmente a un importante incremento de la producción hidráulica, que aumentó un 84,9% respecto al año anterior por las excepcionales lluvias.
Si retrocedemos solo un año más, el conjunto del Estado emitió en 2017 un 4,4% más de GEI que en 2017. De hecho, hoy en día, mientras el conjunto de la UE ha reducido un 24% su emisiones entre 1990 (año de referencia) y 2016, según datos de la UE, España las aumentó un 12,9%.
Debido a la inacción generalizada, organizaciones, colectivos y asociaciones de todo el planeta han convocado el paro global para que “instituciones, Estados y empresas escuchen a la ciudadanía y a las organizaciones que exigen un nuevo modelo socioecológico que no comprometa la supervivencia de la vida tal y como la conocemos”, según un comunicado emitido conjuntamente por el centenar de organizaciones firmantes en España.
Para estas, “los recientes informes sobre el estado de la biodiversidad de la Plataforma Intergubernamental de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES), que señalan que cerca de un millón de especies entre animales y plantas se encuentran al borde de la extinción como consecuencia de las actividades humanas, y el informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) sobre el incremento de la temperatura media global en 1,5ºC, alertan del deterioro de un gran número de ecosistemas, tanto terrestres como marinos, así como del punto de no retorno frente al cambio climático”.
Asimismo, señalan que no responder “con suficiente rapidez y contundencia” a la emergencia climática supondría la muerte y el malvivir de millones de personas, junto a la extinción de cientos de miles de especies y la desaparición de ecosistemas completos. “Los datos son contundentes y el tiempo juega en nuestra contra”, remarcan.
Por ello, exigen que las instituciones, tanto europeas y estatales como autonómicas y locales, asuman inmediatamente su responsabilidad y que estén “a la altura de las necesidades que exige este momento crucial de la historia”. Asimismo, recalcan: “La lucha contra la emergencia climática no puede supeditarse a una ideología o color político, debe ser asumida por todos los partidos”.