El brunch es un término anglosajón que nace de la unión de ‘breakfast’, desayuno, y ‘lunch’, comida. Es una tradición culinaria que tiene sus orígenes en Reino Unido, pero que muchos hemos visto en algunas películas y series de televisión americanas. Lleva ya unos años instalada en algunos lugares de nuestro país.
A veces cuando hay actos institucionales o de empresas, es habitual encontrarse con una recepción de tipo 'brunch'. Es habitual también en lugares donde hay mucha afluencia turística y por ello muchos establecimientos de hostelería de ciudades como Madrid, Barcelona e incluso Málaga.
Movidos por la curiosidad acerca de la llegada a la ciudad de esta tendencia gastronómica, el Faro salió a la calle para averiguar si los melillenses y los hosteleros están adoptando esta moda.
Ahora en verano, con más días y libres y con calma con las vacaciones hay quienes prefieren retrasar la hora del desayuno y aprovechar también para hacerlo fuera de casa. Aunque no no sabemos si se trata realmente de un ‘brunch’ lo que hacen los melillenses.
Pepi, una vecina de la ciudad, nos cuenta que el famoso ‘brunch' lo ha visto en las películas e incluso ha visto otras personas haciendo ese tipo de comida. Sin embargo, asegura que no ha visto a ningún melillense que lo haga. Reconoce que en su casa no hacen ‘brunch’: “Nosotros estamos acostumbrados a desayunar bien, después tomamos la tapita del medio día y la comida”, explica esta melillense.
Nos cruzamos también Carmen y Jesús, son abuela y nieto. Cuando les preguntamos por el ‘brunch’, Jesús explica Carmen lo que es un desayuno muy tarde: “cuando te has tirado un rato durmiendo y por ejemplo a la una más o menos te despiertas porque quieres desayunar”.
“Entonces eso no es un desayuno, yo me espero hasta el almuerzo”, dice su abuela. Carmen afirma que no conocía el término gastronómico y que nunca se levanta tarde. Reconoce también que hace pocos aperitivos, aunque algún día puede tomarse una ‘cervecita’.
Su nieto cuenta que en casa no suelen desayunar muy tarde tampoco. Al estar de vacaciones en el cole, Jesús reconoce puede levantarse sobre las doce de la mañana, aunque su desayuno es el de siempre: un batido de chocolate y el croissant.
Desayuno de campeones
Son pasadas las 12:00 horas, y nos vamos a la cafetería de enfrente del Teatro Kursaal. Ahí nos encontramos con un matrimonio, Fran y Virginia, desayunan con su familia. Él pregunta qué es eso del ‘brunch’ y después de la explicación nos detalla su desayuno de este domingo: un croissant con una tortilla de queso y pavo acompañado con un “cafelito”. Es un desayuno para campeones. Sin olvidar, por supuesto los churros, que son muy típicos en la ciudad.
En cambio, Virginia está tomando café y un pitufo con mantequilla y mermelada. “Yo soy más ligh”, reconoce chistosa. Su desayuno suele ser ese, para poder aguantar la mañana. Pero ellos no suelen desayunar tan tarde, solo los fines de semana, y entre las 10:30 y las 11:00 horas.
Este domingo se les ha hecho las doce del medio día. Con ese horario, esta familia suele comer sobre las dos de la tarde, aunque este domingo se les ha hecho bastante tarde. Por eso Virginia reconoce que quizá a las dos no tengan ganas de comer, así que en este caso retrasarán el almuerzo. Son los primeros melillenses que nos detallan una especie ‘brunch’, al menos es lo que estan tomando este domingo
Al salir del establecimiento nos cruzamos con otra pareja, Laura y Alejandro. “Pues comer y desayunar es lo que voy a hacer yo ahora mismo”. También es lo que hace habitualmente cuando tiene un turno muy largo en el trabajo: “suelo tomar un bollito, una catalana con queso o un té; tampoco una cosa muy grande, solo lo quiero para que me sacie hasta la hora de salir”. Desde ese momento hasta que sale de trabajar, lo que se toma es una frutita.
El desayuno moruno
Tras el café del Teatro Kursaal, visitamos un nuevo establecimiento en la ciudad. Tiene una sombrilla en una esquina de la calle O’donnell y ahí hay un grupo de amigos con sus hijos desayunando café u zumos con tostadas, molletes y especialidades típicas de esta región del norte de África como el pañuelo o el jeringo (son parecidos a los crêpes ).
Sin embargo, Abdel, camarero y encargado de Café Bueno, nos muestra que en la carta tienen lo que llaman un desayuno completo. Es lo más parecido a lo que estamos buscando.Se compone de un café o batidos, que es suele pedir la gente, huevos, ‘tachnift’ rellena de carne picada (es una especialidad panadera magrebí) que además suele ir acompañado de aceitunas ‘morunas’.
Según Abdel, a este desayuno completo también lo llaman “desayuno moruno” por sus especialidades de la zona. El camarero asegura que es muy habitual que sus clientes se pidan el tachnift relleno de carne y también alguno de sus zumos naturales. Los tropicales son los preferidos de la gente.
Entre la clientela asegura que tiene también muchos extranjeros, latinoamericanos, franceses, ingleses y en los últimos días algún turista ruso. Todos ellos suelen venir a pedir un buen desayuno desde en una franja horaria entre las 10:00 y las 13:00 horas.
Finalmente llegamos a la conclusión de que en este establecimiento sí hay un ‘brunch’ en la carta aunque no se llame como tal. Aunque este concepto no existe todavía en la sociedad melillense, algunos ya lo reconocen pese que no lo practiquen, y otros, por unas circunstancias u otras, terminan haciendo algo parecido de vez en cuando. Quizá no tarde mucho en llegar el ‘brunch’ a Melilla.