Los chicos de Javier Consuegra realizaron una defensa intensa ante un rival que terminó desquiciado y que no pudo en ningún momento con la ilusión local.
Intenso primer tiempo el vivido en el Lázaro Fernández en el choque entre melillenses y canarios donde el juego combinativo melillense hizo que se viera un primer parcial de 3-2 favorabe a sus intereses; pero los canarios no estaban dispuestos a perder la cara al choque y a base de calidad en su sistema de ataque hizo que le diera la vuelta al marcador cogiendo una ventaja de dos goles en tan sólo seis minutos.
Pero a partir de este instante apareció el sacrificio defensivo melillense con un juego muy duro que maniató a los canarios y sobre todo con un Nabil en la portería que paraba todo lo que le llegaba. Lo que supuso, unido a una alta eficacia atacante, que cogiera una diferencia de dos goles que las supo administrar durante este primer período llegándose al descanso con la máxima distancia en el marcador con un 13-10.
En el segundo tiempo las exclusiones locales fueron un lastre para irse en el marcador pero ahí estaba Nabil que lo paró todo en los momentos delicados y el Ciudad de Melilla llegó a disponer de una diferencia de cinco goles 18-13 cuando el marcador reflejaba el minuto 40.
La defensa melillense desquició al equipo canario que veía como a falta de 15 minutos los locales vencían por 19-13 y los isleños sufrieron la descalificación de Edgar, uno de sus mejores jugadores.
Los últimos cinco minutos del partido se convirtieron en un intercambio de tantos por ambos bandos, manteniendo la escuadra local una diferencia de tres goles hasta el final del choque que concluyó con victoria melillense por 28-25.
Con la bocina final, estalló la alegría tanto en la grada como en los jugadores que terminaron abrazados y con reconocimiento recíproco.
Partido inaugural
El primer partido de la fase del Campeonato de España Juvenil de Balonmano se saldó con una amplia victoria del Balonmano Antequera ante el Estudiante de Ceuta por el resultado de 45-19.
Desde el saque inicial se vio a un equipo malagueño muy superior en todas las facetas del juego manteniendo durante los primeros veinte minutos una ventaja de cuatro goles a su favor, intentando que los caballas en ningún momento se pudieran meter en el partido. A falta de diez minutos para el descanso, un parcial de 3-0 hizo que los malagueños se fueran al descanso con el tanteador de 19-12.
Tras el descanso se apagaron las luces del equipo caballa ya que tras los continuos fallos en el pase y los rápidos contragolpes antequeranos hizo que en el minuto 40 el marcador registrara un 26-13. A partir de este momento el partido tuvo poca histoia, tan sólo era conocer la ventaja que tendría al final el antequera, siendo el marcador de 45-19 mostrando las credenciales los malagueños para hacerse con el auténtico dominador de esta fase juvenil.