Tanto Comisiones Obreras como Sate - Stes señalan la elevada ratio de alumnos por aula, la falta de centros de enseñanza y la de docentes como principales obstáculos.
Bien recibidos, pero con la vista puesta en problemas más urgentes. Así se podrían resumir las sensaciones de los sindicatos de enseñanza de Melilla ante la llegada de los más de mil ordenadores del Programa Escuela 2.0, dirigidos a informatizar las aulas de los centros de educación de toda España.
Pese a que en términos generales la iniciativa del Ministerio ha sido valorada por las formaciones sindicales, se recuerda que el sector presenta carencias que deben ser atendidas con mayor celeridad. Así lo señaló a ‘El Faro’ el máximo dirigente de Sate – Stes, José Luis López Belmonte, quien subrayó que la medida resultaba “muy satisfactoria” para la calidad de la educación a nivel local.
“Ahora estamos en igualdad de condiciones con el resto de autonomías”, apuntó, “hay que tener siempre la puerta abierta a la llegada de nuevas tecnologías, ya que quien no se adapte a ella se queda atrás”.
Por otro lado, matizó que no es algo “fundamental” en vista de otros problemas que presenta el sector educativo, como la elevada ratio de alumnos por aula, la necesidad de crear nuevos centros, los índices de fracaso escolar y la escasez de profesionales.
En similares términos se expresó el secretario de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (CCOO), Ricardo Jimeno, quien afirmó que los ordenadores eran recibidos “con los brazos abiertos”, aunque considera que la medida del Ministerio es “como empezar la casa por el tejado”.
“Con una pizarra de las de toda la vida y tiza nos conformamos”, apuntó el sindicalista, “pero lo que necesitamos son más centros y profesores para poder trabajar en condiciones óptimas. La informatización de las aulas es positiva, pero lo primero es reducir el número de alumnos por clase para que la enseñanza sea de calidad”.
Instalación en los centros
Los nuevos equipos destinados por el Ministerio de Educación a Melilla, unos 1.174 ordenadores y pizarras electrónicas, ya han comenzado a ser instalados en diversos centros de la ciudad. La intención es que durante este año los alumnos de quinto de Primaria de todos los centros públicos y concertados de la ciudad cuenten con un ordenador. Por otro lado, en sexto curso se distribuirán pizarras electrónicas para el profesorado, y no será hasta el año que viene cuando los alumnos puedan contar con un portátil.
Una inversión que ha supuesto un desembolso de 300.000 euros por parte del Ministerio, y que tendrá su continuidad en años posteriores con la implantación del Escuela 2.0 en los cursos de Secundaria.