Ayer se celebró en la Plaza de las Culturas el concurso de disfraces de mascotas del Carnaval 2019. A medio día fueron muchos los curiosos que se acercaron para presenciar como los amos desfilaban con sus animales a través de un a pasarela especialmente instalada para la ocasión mientras sonaba música carnavalera.
El acto fue organizado por la consejería de Festejos. Paco Díaz, su viceconsejero, explicó que “es una actividad que se nos ocurrió hace 5 años y que se ha convertido en el pistoletazo de salida de las actividades de Carnaval, cada año hay más participantes y más público e intentamos que sea un actividad simpática”. Y añadió que no tenía ninguna preferencia por ninguna de las mascotas, “todas tienen mucho mérito”, afirmó.
En la plaza de las Culturas, hubo una caseta de la protectora de animales San Francisco de Asís. Una de sus responsables explicó que estaban buscando “padrinos y socios” para financiar su labor. Contó que ahora mismo no pueden acoger más animales porque no tiene espacio, así que a parte de buscar financiación, animaron a todos y todas las melillenses que taparon por ahí a acoger a varios de los animales de los que se ocupan.
Rey el obsipo
Los 3 primeros se llevaron un trofeo y una cesta con premios para las mascotas, y el cuarto y quinto clasificado, unas cestas.
Marina se disfrazó de monja y a su perrito Rey, de apenas un año, lo vistió de obispo. Fueron los ganadores del concurso. Marina explicó que elegir esto trajes porque no quería elegir algo que “fuese repetitivo”, así que esta idea le pareció “muy original”. También comentó que ella misma se había encargado confeccionar esto trajes. “Me ha llevado 20 días hacerlos”.
A parte de monjas y obispos, también hubo perros disfrazados de hadas, perros voladores, y hasta perros con disfraces de ‘Up’ o de ‘Star Wars’. Además, tal y como contó el separes que amenizó la mañana, fue la primera vez que participaron en el concurso dos gatos: Mimi y Esmeralda Cola Tiesa.
La bombera y el camión
También participaron Kira y Nala, dos perritas hermanas que ganaron el años pasado disfrazadas de bruja y de caldero. Héctor, su amo, explicó se presentan a este concurso desde la primera edición que se hizo. Este año han quedado segundas. Nara no tiene movilidad en las piernas debido a una lesión en la médula tras sufrir un atropello. “Por eso, aprovechando el carrito que lleva en la parte posterior del cuerpo la hemos disfrazado de camión de bomberos, y a Kira de bombero”. Hector explicó que con el carrito que lleva adherido puede hacer casi todo lo que quiera. “Cuando su hermana sube las escaleras de casa y ve que ella no puede, llora”.
Lo que hay que ver en esta vida