El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) podría no llegar a tiempo para poner en marcha el próximo 1 de octubre el Plan de Coordinación. Además, de las 15 o 16 personas que se verían perjudicadas al no ser contratadas, se produciría un efecto en cadena que podría retrasaría el inicio del resto del programa.
Igualmente, si tal y como advertía ayer el vicesecretario de Estrategia y Política Económica del Partido Popular, Daniel Conesa, no se cumplen con los plazos estipulados, habrá que devolver al Estado parte de los casi 12 millones de euros asignados a la subvención.
El retraso en la puesta en marcha del Plan de Coordinación se produce ante la falta de un responsable en el área. La anterior directora, Esther Azancot, fue fulminantemente cesada por la nueva delegada de Gobierno, Sabrina Moh, tras llegar al cargo.
No se entiende que Delegación no haya designado ya a un sustituto para Azancot, el puesto lleva meses vacante y nadie se está responsabilizando del trabajo del departamento.
En un tema tan sensible como el empleo no se puede paralizar el inicio de unos planes que para muchos melillenses será su sustento durante varios meses. A la Delegación del Gobierno aún le restan 10 días para buscar a un responsable y lanzar el Plan de Coordinación. No es mucho tiempo pero no es imposible, sólo hace falta voluntad. Si se retrasan, los damnificados serán los melillenses.