A pesar de estar a las puertas del otoño, el buen tiempo en una ciudad mediterránea como Melilla no nos va a abandonar hasta dentro de unos meses. Si bien durante el verano las personas suelen recurrir más a menudo a las ‘dietas milagro’ para quitarse esos kilos de más de forma rápida y poder lucir sin complejos el traje de baño, es cierto que el cada vez más arraigado culto al cuerpo está convirtiendo esta práctica en algo habitual durante el resto de meses del año.
Sin embargo, perder peso de forma tan brusca puede acarrear consecuencias fatales para la salud. El endocrino afincado en Melilla, David J. Palao, licenciado por la Universidad Rovira i Virgili de Reus y especialista en Endocrinología y Nutrición por el Hospital Universitario Carlos Haya de Málaga, se posiciona “totalmente en contra” de este tipo de dietas.
Prácticas peligrosas
“Si te fijas, este tipo de dietas son cíclicas, ahora está muy de moda la dieta paleolítica, pero antes lo fueron la dieta Dukan, la dieta Atkins, la dieta disociada...”, resalta el doctor.
Las ‘dietas milagro’ suelen tener muy buena acogida entre quienes las ponen en práctica por sus inminentes resultados, pero las pérdidas de peso tan bruscas pueden tener consecuencias muy negativas para la salud y, en el peor de los casos, pueden llevar a una persona a la muerte: “Las pérdidas bruscas de peso están asociadas a una mayor mortalidad, sobre todo por arritmias cardíacas, por no hablar del efecto rebote que suelen producir en el paciente cuando las abandona”, advierte el endocrino.
No todo vale
“Para bajar de peso he visto de todo... Desde gente que dice que el zumo de limón adelgaza, hasta quienes compran por internet los llamados quemagrasas”, asegura. “Lo único que les diría a los lectores es que, si están pensando en tomar alguna ayuda para bajar de peso, lo que deben hacer es consultar a su médico o a un endocrino, dado que, en muchas ocasiones, el único que se beneficia de esas ‘ayudas es el que las vende” dice el doctor.
El no acudir a un profesional de la salud para tratar problemas de peso y otras dolencias es una decisión que ningún facultativo recomienda. “El señor Steve Jobs, uno de los fundadores de Apple, sufría un cáncer y acabó falleciendo como consecuencia de seguir la famosa dieta macrobiótica, a la que se le atribuyen propiedades curativas, y abandonar los consejos de su médico oncólogo” ejemplifica.
“Para bajar de peso he visto de todo... Desde gente que dice que el zumo de limón adelgaza, hasta quienes compran por internet los llamados quemagrasas”, asegura.
Interpretar las etiquetas
El doctor señala que para encontrar una de las principales causas del sobrepeso en España hay que mirar dentro de los hogares: “El problema es el día a día en nuestras casas a la hora de preparar la comida. Los españoles comemos bastante mal, aunque la tendencia es a pensar lo contrario”.
“Mucha gente cree que estar a dieta es comer ensalada y pechuga de pollo a la plancha. Nada más lejos de la realidad: la alimentación saludable comienza en el momento en el que entras en el supermercado. Si no sabes interpretar una etiqueta nutricional es muy fácil comprar alimentos insaludables”, apunta el endocrino Palao.
Una buena alimentación pasa por un consumo abundante de verduras, hortalizas, frutas, legumbres, cereales integrales, frutos secos y aceite de oliva. “Estos grupos de alimentos han demostrado prevenir enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer”, comenta.
Según el doctor Palao, comer de forma sana “mejora todos los aspectos de la esfera bio-psico-social”. También apunta que estos hábitos nos ayudan a relacionarnos con personas igual de saludables, lo que conduce al individuo a “ser más moderado en otras cuestiones de la vida