ras Amazigh y Sefardí inauguró ayer el espacio para la exposición sobre la historia y la cultura del pueblo gitano. La muestra contiene varios elementos que explican su lengua, su música y su cultura general.
Hay varias secciones en esta nueva exhibición como un mapa donde se explica el éxodo de los gitanos desde la India, las tradiciones de sus fiestas, el respeto a los mayores o el papel de la mujer dentro de la comunidad.
Varios representantes del gobierno asistieron al evento junto a decenas de personas, miembros de la comunidad gitana.
La consejera de cultura, Fadela Mohatar, explicó brevemente el proceso para crear esta exposición, que aún tiene más elementos que mostrar. “Estamos haciendo un atlas etnográfico, un documento científico con José Heredia, miembro de la comunidad gitana”, dijo Mohatar. “Hemos querido poner en valor la cultura gitana”, agregó.
Después de la introducción de la consejera, intervino el director del Instituto de Cultura Gitana, Diego Fernández, que se mostró muy agradecido con la Ciudad por este espacio cedido: “Aquí descubristeis la interculturalidad”. Fernández habló del mestizaje en España y cómo fueron muchas etnias y culturas las que pisaron la península para dejar su huella.
Fernández recordó la multiculturalidad de Melilla mencionando a los bereberes, a los sefardíes y a los cristianos como símbolo de unidad multicultural. “Hay una gran cantidad de elementos culturales en España y debemos estar orgullosos de ellos”, apuntó posteriormente.
La exposición sobre historia y cultura gitana es una oportunidad para erradicar estereotipos tan arraigados sobre este pueblo. “He de decir que los gitanos hemos sufrido mucho desde que abandonamos la lejana India y recorrimos las estepas rusas”, enfatizó Fernández. “Es muy difícil hablar de España sin mencionar a los gitanos”, recordó después.
Diego Fernández continuó su discurso hablando de cómo la lengua y la forma de socializar en España tiene sus rasgos gitanos: “No se trata solo del flamenco o de unos grandes pendientes, sino de cómo el romaní, además del árabe se ha introducido en el español”.
Esta idea cuesta explicarla en otras ciudades, según manifestó Fernández. El director del Instituto de Cultura Gitana admitió que su discurso integrador no cala en todos los lugares. Consideró que “la gente piensa que los gitanos queremos decir las cosas de una manera totalmente contraria a la realidad”. Fernández dijo que estas situaciones no las ha visto en Melilla porque son muchas culturas y religiones las que habitan juntas.
Diego Fernández alabó el trabajo de José Heredia por su investigación para presentar esta nueva exposición. La exposición relata la historia de los gitanos desde su partida desde la India hasta varios puntos de Occidente, uno de ellos la ciudad de Melilla.
La investigación que se ha llevado a cabo recoge datos que afirman que el pueblo calé ya estaba aquí en 1634. Durante el siglo XIX, fueron muchas familias gitanas las que llegaron a Melilla como los Heredia o los Carmona. Fernández habló de cómo las circunstancias de cada época han hecho que algunas culturas no estén institucionalizadas o no disfruten de un espacio público para integrarse y que la ciudadanía la descubra. Diego Fernández quiso recalcar que en el Museo de las Peñuelas “se han hecho bien las cosas porque se trata de ceder a los gitanos una representación ante el público de manera que todos lo perciban como algo propio”.
Diego Fernández reivindicó el papel de su cultura en la sociedad. Uno de sus proyectos actuales es abrir el Museo del Pueblo Gitano en Madrid. “Se abrirá porque tiene que existir un lugar en el que quepa nuestra historia”, dijo Fernández. El director del Instituto de Cultura Gitana puso fin a su discurso con el saludo tradicional de los gitanos. Primero lo dijo en romaní y luego en castellano: “Salud y libertad”.
Posteriormente, el presidente de la ciudad, Juan José Imbroda, intervino para dar las gracias a Diego Fernández y recordar que Melilla “ha recibido con total normalidad esta exposición”.
Una vez concluidas las declaraciones a la prensa, el encargado de la investigación histórica y miembro de la comunidad gitana, José Heredia, explicó a los asistentes cada sección de la muestra.