Educación. El colegio La Salle inició ayer las jornadas de Azules y Amarillos, en las que sus alumnos se dividieron en dos equipos, según estos colores, y participanon en distintos juegos deportivos para fomentar la colaboración entre ellos, más allá de la competitividad.
Los alumnos de La Salle empezaron ayer las jornadas de Azules y Amarillos, donde los 800 estudiantes del centro se dividieron por equipos, según estos colores, para competir en distintas pruebas y juegos deportivos. El principal objetivo de esta actividad va más allá de la competición, ya que pretende fomentar la solidaridad y el trabajo en equipo.
Tanto los alumnos de educación Infantil, como los estudiantes de último curso de la ESO formaron parte de esta iniciativa, que ya es una tradición en este centro concertado. De hecho, antiguos miembros del claustro de La Salle, así como exalumnos del colegio, asistieron a esta jornada para involucrarse en su organización.
La intención es que todos los alumnos del colegio compartan la ilusión y la alegría por pasarlo bien, incluso los estudiantes de cuarto de la ESO, que al ser su último curso en el centro, lucían una camiseta verde y formaban parte de la organización junto a los profesores del centro.
La clausura de Azules y Amarillos se celebrará este viernes a las doce y media del mediodía con la actuación de la Escuela de Flamenco en el patio del colegio. Así, se cerrará una etapa hasta el año que viene.