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La mayoría de las personas que viven actualmente en el centro son de Guinea Conakry y de Siria
El Centro Temporal de Inmigrantes de Melilla (CETI) acoge actualmente a un total de 950 personas, después del último ingreso que se produjo ayer por la entrada de una patera con 22 subsaharianos a bordo. Fuentes del centro apuntaron en declaraciones a El Faro que, aunque el número de residentes es elevado, con la adaptación que se hizo en las instalaciones, cuentan con espacio suficiente y no es necesaria la instalación de tiendas de campaña como ha ocurrido en el pasado.
Hay que recordar en este punto que la ocupación inicial del centro cuando se construyó era de alrededor de 480 personas. Sin embargo, tras las entradas masivas de 2014, cuando se llegaron a superar los 2.000 inmigrantes acogidos, se hicieron reformas y se construyeron nuevos módulos para ampliar la capacidad ante la opción de que el número de residentes pudiera seguir aumentando, más aun teniendo en cuenta las numerosas llegadas de ciudadanos sirios a Melilla huyendo de la guerra.
Traslados semanales
Además, la Delegación del Gobierno lleva tiempo llevando a cabo una política de traslados a la península semanales para evitar la sobreocupación e intentar que la estancia de los inmigrantes en este espacio sea realmente temporal. Esta misma semana se han producido envíos a otras provincias españolas.
En cuanto a las principales nacionalidades de los residentes en el CETI, según informan desde el centro, la mayoría son de Guinea Conakry, seguidos de personas procedentes de Siria.
15% de niños
Entre los cambios que se han producido en estas instalaciones en los últimos tiempos se encuentra el aumento de residentes menores de edad, entre otras cosas porque gran parte de los sirios llegan en familia. Actualmente hay 150 niños en el centro, lo que significa que suponen algo más del 15% del total.
A pesar de las actuaciones que se realizaron para la ampliación, el centro continúa mejorando. Desde hace alrededor de dos meses se están llevando a cabo actuaciones de adecentamiento en los módulos comunes y en parte de las habitaciones de los residentes. El objetivo es que los inmigrantes que viven en el CETI estén en las mejores condiciones posibles.
Mejoras en el centro
Hay que tener en cuenta que el elevado grado de ocupación que se mantuvo en estas instalaciones durante meses hizo que se produjeran muchos desperfectos. Ahora, aprovechando que la situación no es tan complicada, se ha optado por adecentar aquellos espacios que estaban en peor situación.
Además, a principios de este mismo año, se adquirieron taquillas y literas para cambiar aquellas que se encontraban en peores condiciones.