Ayer terminaban las actividades y competiciones organizadas con motivo de la XX Semana Náutica de Melilla.
La vigésima edición del ya mítico evento parece haber dejado un buen sabor de boca a los organizadores, al menos, a los encargados de la diversión de los más pequeños de la casa.
En declaraciones a El Faro, Elvira Molina, coordinadora de los talleres para niños, comentó lo satisfechos que están con la participación de los menores en esta actividad paralela a las competiciones deportivas. Se trata de uno de los eventos que nacen con la intención de que la Semana Náutica no sea sólo un acontecimiento deportivo, sino un evento abierto a toda la población melillense, incluyendo a personas de todas las edades.
Precisamente para englobar a todas las franjas de edad está la embarcación ‘Golondrina’. El ya mítico barco se esmera en pasear a melillenses por el mar verano tras verano, una actividad que gusta a toda la familia.
Si unimos estas actividades a las deportivas, de las que cabe destacar el triunfo de la tripulación del Ciudad de Melilla en la Regata Dos Continentes, la suma da como resultado un producto del que puede disfrutar todo aquel melillense que no haya decidido irse de vacaciones, puesto que los conciertos en Melilla La Vieja y en el Puerto Noray completan una oferta de ocio y cultural casi sin parangón en la ciudad.